A principios de año la marca japonesa Mazda confirmó el desarrollo de un motor rotativo, aunque no para un deportivo como el desaparecido Mazda RX-8 (y sus predecesores), como soñaban los puristas y aficionados de la marca, sino para modelos híbridos y eléctricos de nueva hornada.
Lo último que confirmó el CEO de Mazda, Akira Marumoto, es que la próxima aplicación comercial del nuevo motor rotativo (o wankel) sería en un modelo eléctrico de autonomía extendida, aunque de momento no se ha puesto fecha a su lanzamiento.
Ahora, siete años después del fin de la producción del Mazda RX-8, la marca nipona ha puesto a rodar en el circuito alemán de Nürburgring Nordschleife dos mulas de pruebas basadas precisamente en el deportivo RX-8, y las imágenes en cuestión están dando la vuelta al mundo.
Teniendo en cuenta que a priori no tiene ningún sentido probar un modelo que hace años que no se fabrica, lo lógico es pensar que están utilizando este disfraz para probar nuevas tecnologías, y todo apunta a que se trata precisamente del nuevo motor rotativo, aunque se desconoce si es un modelo híbrido, ya que por el sonido queda claro que no se trata de un eléctrico 100%.
El primer eléctrico en 2020
De momento, y hasta que Mazda confirme algo de manera oficial, son todo especulaciones, aunque lo que sí está claro es que para 2020 el fabricante japonés ha prometido que tendrá en su gama un modelo eléctrico puro en 2020, y que el eléctrico de autonomía extendida llegará algo después.
Este primer eléctrico será un desarrollo propio de la marca de Hiroshima, aunque como ya sabíamos Mazda llegó a un acuerdo con Toyota para la fabricación de modelos eléctricos, por lo que en adelante los productos cero emisiones de Mazda podrían ser de desarrollo conjunto.