Era de esperar. A la FIA y la FOM no le gusta nada el olor a goma quemada y el humo que provocan los monoplazas cuando hacen ceros o donuts. Un acto, que a su modo de ver, no está a la altura de la máxima categoría. Por eso, cuando hemos visto como el alemán llegaba a la recta de meta con su RB9 y se ponía a celebrar su título con esta maniobra sabíamos que iba a tener consecuencias.
Unas horas más tarde ya sabemos que a Sebastian Vettel, sus donuts le van a costar una reprimenda, la primera de la temporada para el piloto alemán por lo que no tendrá consecuencias mayores. Los comisarios han tenido en cuenta lo especial de las circunstancias para no establecer una sanción mayor. Por su parte, Red Bull también ha sido sancionada, con 25.000 dólares, por no conseguir que su piloto llevara el monoplaza al parque cerrado. De nuevo se demuestra que más que personas, la FIA está dominada por máquinas...