Ahora que Lewis Hamilton lo tiene todo de cara para poder conseguir su primer título mundial dentro de menos de dos semanas en Interlagos, en el seno del equipo McLaren preocupa y mucho la fiabilidad del motor Mercedes con el que el británico afrontará la última carrera de la temporada.
No olvidemos que a diferencia de Massa, que estrenará motor en Brasil, Hamilton tendrá que utilizar en Interlagos la misma unidad con la que ganó y se paseó el pasado domingo en Shanghai. A pesar de que el piloto de McLaren no ha utilizado el 'motor comodín', la normativa no permite recurrir al mismo en la última carrera de la temporada.
Y por otro lado está la escasa fiabilidad demostrada por el motor y también por el coche de su compañero Heikki Kovalainen en las dos últimas carreras.
Si bien está claro que durante toda la temporada el coche de Hamilton ha sido cuidado y mimado mucho más que el de su compañero finlandés, a nadie se le olvida en McLaren que Kovalainen rompió su motor hace dos carreras en Japón. Y aunque fue la primera rotura de un motor Mercedes desde el GP de Japón 2006, "siempre estás preocupado porque un pequeño desliz puede provocar que el Campeonato se vaya a pique", reconocía el Director Ejecutivo de McLaren, Martin Whitmarsh.
Y por si eso fuera poco, Kovalainen, que este año ha sido víctima de todo tipo de problemas a diferencia de su compañero, el pasado domingo en Shanghai sufrió dos incidentes que de repetirse en el caso de Hamilton podrían dar al traste con sus opciones al título. Primero pinchó su neumático delantero derecho, lo que le obligó a completar una vuelta casi completa al circuito hasta llegar a boxes rodando muy lento y lo relegó a la última posición. Un pinchazo de Hamilton en el bacheado Interlagos podría ser fatal.
Y por último, otro tema que da que pensar y mucho en McLaren es el problema hidráulico que finalmente obligó a Heikki Kovalainen a abandonar en China. Vaya, que en Brasil más que nunca la fiabilidad será clave y en McLaren, ahora que tienen el título tan cerca, las dudas y la preocupación por una avería en Interlagos les tienen muy, pero que muy alerta.