No se anunció oficialmente que el Consejo Mundial del Motor diera el visto bueno a la abolición de los splits en el Mundial de Rallyes, pero los pilotos parece que ya se están acostumbrando a la idea de que en 2015 no tendrán la posibilidad de saber cómo evolucionan sus rivales en tempo real dentro del coche. El primero en probar esta sensación ha sido Jari-Matti Latvala, durante la última etapa del Rally de Australia mientras se jugaba el triunfo con Sébastien Ogier.
El finlandés decidió decirle al equipo que no le comunicaran los tiempos de ninguno de sus rivales porque únicamente se quería “enfocar en su estilo de pilotaje”, algo que finalmente no le dio resultado en la lucha por la victoria, pero que obviamente le sirve como entrenamiento si finalmente se prohíben los splits dentro del coche. A pesar de ello, Latvala nunca ha sido un piloto que haya prestado mucha atención a los tiempos parciales y le suele ser más fructífera la táctica de salir al máximo durante todo el rally que guardarse algo. Es ahí cuando llegan sus errores como en Polonia 2009 y Alemania 2014.
Vía | Rallye-Magazin
