Una carrera que enfrente el DTM y el Super GT disputada sobre suelo japonés o chino en 2015. Este parece ser el próximo objetivo en la internacionalización de las normativas DTM tras las últimas discusiones entre representantes del ITR, la Japan Race Promotion e IMSA. Esta carrera tendría lugar en 2015 como preámbulo a una carrera de exibición en 2016 en Estados Unidos que llevaría a un campeonato entero de cara a 2017.
Esta reunión se celebró en Daytona con motivo del fin de semana de las 24 horas del circuito homónimo, primera ronda del recién inaugurado USCC. La "batalla" entre los coches atmosféricos del DTM y los turbo del Super GT seguramente necesitaria algún tipo de sistema para igualar el rendimiento de las máquinas ya que no se rigen exactamente según el mismo reglamento, por mucho que se parezcan. Hans Werner Aufrecht declaró estar ilusionado con el proyecto.
Ser testigo de la intensa cooperación de los organizadores de campeonatos, asociaciones y fabricantes de tres continentes y culturas distintas en un mismo proyecto se siente genial. Con los planes de las primeras apariciones conjuntas en pista, los primeros resultados de esta colaboración constructiva pasará a ser palpable para los aficionados.
Mientras que el Super GT ha cambiado la normativa de sus chasis para acercarse al DTM con unos nuevos coches que veremos en 2014, el propio DTM tiene las miras puestas en cambiar de motores. Se pasaría de los actuales V8 atmosféricos a motores más pequeños de inyección directa y turbo, similares a los del Super GT. Según el propio Aufrecht, el objetivo sería que estos motores estuvieran ya en uso en 2016, aunque los fabricantes insisten en que 2017 es una meta más realista, sobre todo por los costes de desarrollo.
Vía | Autosport.com