Ayer lunes, tras la celebración de la segunda prueba del Europeo de Rallycross 2013 en Montalegre, Carlos Sainz aprovechó para probar uno de los Volkswagen Polo Mk5 de Rallycross de Marklund Motorsport, estrenados este año y que disputan tanto el Europeo como el Global Rallycross Championship. Y es en este último certamen, y su cita de Barcelona en apenas tres semanas, donde Anton Marklund desea ver al madrileño compitiendo.
El joven piloto sueco no escondió en declaraciones a ERC24 que "esperamos que Carlos esté con nosotros en Barcelona. Al fín y al cabo vino hasta aquí a probar el coche, una buena señal" y alabó el bagaje técnico que el madrileño aportó al equipo con su test. De hecho, la web especializada en rallycross explica que Sainz realizó mucho trabajo de reglaje en el Polo, para luego pedir además cambios en la dirección y su turbo. De aceptar la propuesta el bicampeón del mundo, heredaría así la segunda unidad de Marklund Motorsport, que en Foz de Iguaçu llevó hasta la final el vencedor de las 500 Millas de Indianápolis en 2004, Buddy Rice, si bien es cierto que al Polo le falta aún bastante para luchar de tú a tú con los Ford Fiesta de Olsbergs.
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