Henrik Fisker, CEO de Fisker Automotive, ha anunciado recientemente el acuerdo para comenzar a vender su modelo eléctrico de autonomía extendida Karma en tierras chinas. Para ello han acordado con China Grand Automotive Group; un distribuidor que se encarga del negocio de la venta y servicio de atención al cliente de más de 40 marcas en su país.
Con este acuerdo Fisker amplía los mercados en los que está presente, buscando ampliar de esa manera las ventas de su sedán de lujo para de esa manera seguir incrementando sus ingresos y conseguir el dinero que necesitan para continuar con sus planes de futuro.
Eso sí, si el Fisker Karma ya es un vehículo caro de por sí, con las leyes chinas sobre importación de vehículos lo será aún más. Al Fisker Karma puede ocurrirle algo parecido al caso del Chevrolet Volt, que al no compartir tecnología con los fabricantes locales el precio del mismo hace que sus ventas sean excesivamente bajas.
Fuente | Automotive News En Motorpasión Futuro | Fisker retrasa la producción del Surf y del Sunset, Las ventas de eléctricos en China tampoco cumplen las expectativas