La buena y prometedora idea que parecía ser el Fisker Karma estuvo a punto de desaparecer por completo. Ahora, la compañía se llama Karma Automotive y ha sobrevivido gracias a la inversión del grupo chino Wanxiang Group). Karma sigue trabajando en la actualización de lo que fue el Fisker Karma y prepara su nueva factoría, situada esta vez en suelo estadounidense.
Para poder renacer de sus cenizas, el Karma contará con baterías A123 System (propiedad del grupo Wanxiang) y una serie de componentes de origen BMW. La marca llegó a un acuerdo la semana pasada con BMW para poder utilizar parte de la tecnología de los BMW i y de los BMW híbridos.
De momento se desconoce la naturaleza exacta de los componentes que BMW venderá a Karma. La escueta nota de prensa, antes del anuncio oficial, se limita a un evasivo: “BMW proporcionará a Karma Automotive con su última tecnología en propulsores, incluyendo los sistemas de recarga y una amplia gama de sistemas para híbridos y coches eléctricos”.
El primer Karma Automotive debería llegar al mercado a finales de 2016. Será una evolución del Fisker Karma original y de tipo híbrido enchufable. A medio plazo está previsto el lanzamiento de un modelo 100 % eléctrico.
En Motorpasión | Y este es el teaser del renovado Fisker Karma
