Un nuevo incidente con daños materiales en un Tesla Model S involucra como culpable al Autopilot, o al menos esa es la versión que quiere que nos creamos el propietario del coche. El vídeo lo tenéis a continuación y podéis juzgar por vosotros mismos, pero es un nuevo ejemplo de quererle buscar los tres pies al gato.
Luo Zhen circulaba a una velocidad media con el Autopilot conectado por el carril izquierdo de una autovía tras otro vehículo en China cuando aparece un vehículo averiado invadiendo parcialmente el carril. El coche que le precede se mueve a la derecha para esquivar el obstáculo, pero el Tesla... no lo hizo.
El Tesla del señor Zhen supuestamente no reconoció que había otro vehículo metido en el carril y no varió su trayectoria, impactando fronto-lateralmente. Los daños no fueron demasiados, pero el dueño afirma que ascendieron a un importe de unos 6.800 euros.
Lo peor de todo no es el choque en sí mismo (y aquí viene lo bueno), sino que Zhen culpa de lo ocurrido al Autopilot por zafarse de un choque que podría haber sido perfectamente evitable y al conductor del vehículo averiado. Luo pretende que el coste de la reparación lo asuman Tesla y el otro conductor, el primero por exagerar las habilidades de su Autopilot y el segundo por estacionamiento ilegal.
Bueno, este señor puede pedir lo que quiera. Salta a la vista que (en caso de ir activado) el Autopilot no funcionó correctamente, es un sistema aún en desarrollo y, como hemos hablado en varias ocasiones, no es un piloto automático y el conductor debe mantener la atención en la carretera para recuperar el control si fuera necesario.
En cualquier caso, Luo Zhen se pasó esto último por las gónadas. Tuvo tiempo suficiente (unos cinco segundos) desde que aparece claramente en escena el coche que está en el arcén/carril y se produce el impacto, así que o no iba pendiente de la carretera o simplemente dio por hecho que no iba a actuar hiciera lo que hiciera el Autopilot.
Y el enfado de Zhen no queda ahí, porque añade que tuvo que parar el coche manualmente porque éste continuaba su camino como si no hubiera pasado nada. Ante todas estas ocurrencias, a este conductor no le quedan más que dos opciones: o iniciar un farragoso proceso legal contra Tesla, o baja los humos antes de que se meta en un lío peor, porque en China es ilegal eso de no llevar las manos en el volante.
Por el momento, nadie ha confirmado aún que el Tesla llevase el Autopilot conectado, pero lo que sí podemos confirmar a la vista de las imágenes es que Zhen se está intentando quitar culpas a todas costa.
En Motorpasión | ¿Se chocó solo este Tesla Model X, como afirma su dueño? Tesla sabe que no
