A ver si os váis a pensar que por tener un coche de 580.000 euros la gente no tiene derecho a marcarse sus drifts en circuito cerrado, convenientemente humedecido para la ocasión.
Un reportero de la revista inglesa iCar tuvo la suerte de probarlo, con una copa de champán en la mano y un piloto del equipo Silver Arrows al volante.
El 6.0 V12 biturbo de 612 cv puede no estar muy acostumbrado a estos menesteres, pero se le ve ágil cuando le toca hacer papeles poco señoriales.
Por cierto, echando un ojo a la lista de opciones del Maybach, me llama la atención que la mayoría tiene un coste despreciable comparado con el del coche.
Por ejemplo, por algo más de 2.500 euros tenemos unas llantas especiales. Pero porcentualmente, equivale a gastarnos 65 euros en una opción de un coche de 15.000.
La única que podría llegar a doler es la de blindaje de alta protección, 190.000 euros. El precio de un Ferrari, para entendernos.
Vía | autoblog.nl > iMotor
En Motorpasión | Maybach 62 S