Ahora que Polestar vuela libre como una marca independiente de Volvo (aunque ligada a los coches suecos) y tras conocer su última creación convirtiendo al XC60 Polestar en el Volvo más potente de la historia empatando con el XC90 Polestar, siguen llegándonos noticias frescas y muy interesantes de este preparador.
El especialista en poner a punto los Volvo estaría planteándose un modelo de altas prestaciones en configuración coupé al que le podría seguir un segundo, ambos utilizarían plantas motrices híbridos gasolina-electricidad pero lo más importante es que serían modelos propios, vestidos con carrocerías diseñadas de manera independiente.
Carrocería propia, hasta 600 CV y fibra de carbono
Además del aspecto exterior, el diseño y puesta puesta a punto de la parte ciclo correría a cargo de Polestar, creando máquinas deportivas homologadas para circular por la carretera pero con un comportamiento dinámico muy por encima de cualquier producto ofrecido por Volvo. En realidad es un plan que llevan tiempo tramando.
Presumiblemente, el primer modelo con el que Polestar rompería la baraja para postularse como un fabricante independiente sería un coupé con carrocería de fibra de carbono y una potencia máxima en torno a los 600 CV. Suena bien, ¿verdad? Pues podría ser desvelado en el Salón de Frankfurt el próximo mes de septiembre.
Actualmente el modelo más potente que ha salido de sus talleres es el T8, un cuatro cilindros sobrealimentado 2.0 litros de 421 CV (334 CV del térmico y 87 CV del eléctrico) y 680 Nm de par motor. Para conseguir llegar a la cifra de 600 caballos tendrán que hacer poco menos que magia o recurrir a modificaciones mecánicas extensivas. Incluso se están planteando reducir la autonomía en modo eléctrico para generar más potencia.
La intención de llevar esta idea a buen puerto se confirmaba de manera tímida al leer que "Polestar se beneficiará de las sinergias en cuanto a tecnología e ingeniería, favoreciendo las economías de escala y permitiendo que puedan ofrecer diseños y creaciones propias sobre coches electrificados de altas prestaciones", según el comunicado de Volvo en el que anunciaban la separación de ambas marcas desde que la matriz sueca la adquiriese oficialmente en 2015.
Así pues, el próximo Volvo S60 que se estrenará en 2018 puede ser un candidato perfecto para convertirse en un modelo "coupeizado" decorado con el azul intenso del preparador, además de lucir un motor con aptitudes muy mejoradas. Un movimiento que podría tener mucha más repercusión que tunear un coche como cualquier otro del concesionario.
Mientras que Polestar tiene la intención de especializarse en la preparación de motorizaciones híbridas, en la otra dirección Volvo se beneficiaría de estas plantas motrices para equipar a sus modelos más altos de gama, equiparándose a las divisiones más deportivas de la competencia como Mercedes-AMG, BMW M o Audi Sport.