Vale que la prueba del alce, esa que se realiza mediante dos volantazos sucesivos a una velocidad de 70 a 80 km/h y sin tocar freno, no le salió al Jeep Grand Cherokee Overland tan mal como le pasó al famoso Mercedes Clase A de 1997, que se dio un buen revolcón, pero en este caso los periodistas suecos que analizaron el coche ante las cámaras igualmente dejaron constancia de lo que había sucedido cuando lo pusieron a prueba.
Y lo sucedido fue que el coche se puso a dos ruedas. Claro, la imagen de un todoterreno inclinándose así por un volantazo es dramática, así que los ingenieros de la marca fueron volando hacia Suecia para ver qué había podido pasar. Los periodistas intentaron entonces reproducir el fail hasta en 11 ocasiones… sin que nada raro ocurriese. Como cuando uno llama al informático para resolver un problema y justo cuando llega el ordenador funciona perfectamente.
En Suecia, el Jeep Grand Cherokee Overland se comercializa con neumáticos de dimensiones 265/50 R20 y con sistema antivuelco y ESP, y tras la prueba, que los periodistas realizaron a sólo 63 km/h, desaconsejaron que se vendiera con esta configuración. Pero eso no es todo, ya que ahora hay un cierto rifirrafe por las condiciones en que se realizó la prueba, que vemos a continuación:
Los periodistas de Teknikens Värld no son inexpertos precisamente. Llevan haciendo pruebas del alce desde la década de 1970 y dicen cumplir a rajatabla las especificaciones que marca la legislación sueca y la ficha técnica para cada vehículo que prueban. En el caso del Jeep, puede transportar una carga útil máxima de 725 kg, lo que equivale a cinco ocupantes de 90 kg y 265 kg de equipaje.
Los ingenieros del Grupo Chrysler desplazados hasta el lugar afirman categóricamente que la unidad que aparece en el vídeo se movía con exceso de carga en el maletero, y que cuando hicieron las pruebas de contraste con otras tres unidades idénticas cargadas como ellos indicaron nada raro sucedió, así que la polémica está servida: ¿a quién hacemos caso?
Con posterioridad a la publicación de esta nota, hemos recibido una respuesta oficial de la marca, que reproducimos textualmente a continuación:
Durante el test, la revista tuvo posibilidad de capturar imágenes del GCH a 2 ruedas durante una maniobra extrema en condiciones límite de sobrecarga del vehículo.
Una vez la revista avisó a Grupo Chrysler sobre este hecho, los ingenieros del grupo han realizado numerosas pruebas para reproducir en las mismas condiciones estas maniobras sin que hayan dado en ninguno de los simulacros como resultado que el coche se ponga a dos ruedas.
De nuevo la revista realizó el mismo test con las mismas maniobras y condiciones el día 8 de julio, con presencia de los ingenieros del grupo Chrysler. 3 coches fueron testados en un circuito de pruebas preparado por la Revista y ninguno de ellos reprodujo este comportamiento.
Este atípico resultado se obtuvo empleando un vehículo con sobrecarga por encima de las especificaciones de peso máximo establecidas por el fabricante.
También influyó la extrema maniobra realizada por el revista, maniobra que no está certificada por ninguna entidad reguladora y que tampoco se usa o está prestablecida dentro de los parámetros que sirven para medir y en su caso penalizar el ratio de seguridad de este tipo de vehículos.
El grupo Chrysler siempre presta especial atención a cualquier incidencia que pueda producirse en términos de seguridad y por ello los ingenieros del grupo están examinando el hecho acaecido para entender mejor las afirmaciones de esta revista.
El instituto americano “Insurance Institute for Highway Safety” galardonó al GCH MY 2012 con el premio “Top Safety Pick”. El GCH Grand Cherokee MY 2012 cuenta con un amplio palmarés de premios dentro de la categoría de los SUV, entre otros por su extrema seguridad, contando en su equipamiento de serie con ESP y ERM, yendo más allá de los requerimientos de seguridad establecidos por las autoridades y convirtiéndose así en el SUV más galardonado de la historia.
Vía | Jalopnik
Fuente | Teknikens Värld