Cuando Volkswagen lanzó al mercado el año pasado la tecnología TSI, sentó las bases del futuro de los motores de gasolina del grupo, de momento sólo en esa marca. Motores pequeños con la potencia de los grandes pero con el consumo de los pequeños.
Así salieron a la luz dos motores TSI de 1.390cc de 140 y 170 CV respectivamente, utilizando una combinación de inyección electrónica (FSI) con un compresor volumétrico y un turbocompresor. El recién llegado dará 122 CV y el Golf será el primer modelo en montarlo en su vano, para reemplazar al 1.6 FSI atmosférico de 115 CV.
El nuevo motor ofrece claras ventajas: reduce el consumo (-6%) y mejora notablemente sus características de potencia (+7 CV) y par motor (200 Nm, +30%). Teniendo en cuenta su pequeña cilindrada, también son menores los impuestos en determinados países, como el nuestro, pagan menos impuestos los gasolina inferiores a 1.600 cc. Este motor no tiene compresor volumétrico, sólo el turbo e intercooler.
En la imagen se observa la función del intercooler, al refrigerar los gases de entrada pasados por el turbo (color rojo) y meter en los cilindros el aire más frío (flujo azul). En este motor TSI, el intercooler se refrigera con agua (flujo verde) y no con aire, como en el de 140 y 170 CV.
El 80 por ciento del par motor emerge a partir de las 1.250 rpm, y la entrega de potencia se produce a partir de las 1.500 rpm. A velocidades lentas, el nuevo TSI mejora en un 66 por ciento su par motor respecto a su predecesor. El par máximo está disponible entre 1.500 y 3.500 RPM, lo que reduce la necesidad de cambiar y podemos aprovechar marchas largas, bajando el consumo.
Por eso el TSI llevará asociado relaciones de cambio más largas y una caja automática DSG de 7 velocidades que se venderá este año. Funcionará con gasolina de 95 octanos de toda la vida. Por pura lógica, este motor llegará a más modelos del grupo Volkswagen en no mucho tiempo, pero de momento no se incorporará a las gamas Skoda, Audi o SEAT. No sé a qué esperan.
Para los profanos, un minidiccionario para entender tanto palabro:
- Compresor volumétrico o supercargador: Aumenta la cantidad de aire en los cilindros en función de la velocidad del cigüeñal
- Turbocompresor: Aumenta la cantidad de aire en los cilindros en base a la velocidad de salida de los gases de escape
- Inyección directa FSI: La gasolina se inyecta directamente en el cilindro y no en la precámara. Los diesel actuales funcionan así.
- Intercooler o intercambiador de calor: Los turbos calientan mucho el aire, y por la Ley de Gay-Lussac, entra menos cantidad al cilindro, de modo que este componente enfría el aire comprimido para que entre mejor en el cilindro. Es muy parecido a un radiador.
Fuente | Volkswagen