Hoy en día es misión imposible encontrar un coche cuyas funciones no se controlen casi en su totalidad a través de una pantalla. Es hacia donde va el diseño en la esfera automotriz (sin mencionar la realidad aumentada): salpicaderos convertidos en pantallas, como hizo cierta marca alemana en 2021 con su buque insignia eléctrico.
Hyundai Mobis, la división tecnológica del grupo coreano, quiere dar otro paso y ha diseñado la que asegura es la pantalla más fina del mercado en un vehículo: una QL ('Quantum Dot and Local Dimming Display').
La pantalla QL desarrollada y diseñada por Hyundai Mobis promete mejorar la reproducción del color y la relación de contraste a niveles OLED. También cuenta con una pantalla curva grande de 27 pulgadas y un diseño de 14,5 mm de grosor que puede incluso reducirse en 10 mm según las necesidades del cliente.
Esta pantalla, explican los coreanos, combina la tecnología 'Quantum Dot', que mejora la reproducción del color para una representación más realista de los colores originales, y la tecnología 'Local Dimming', que aumenta el contraste entre los colores claros y oscuros para una calidad de imagen más precisa.
Tras el desarrollo de la primera pantalla enrollable del mundo el año pasado, Hyundai Mobis busca llevar esta nueva tecnología a los coches de Europa y Norteamérica. Aunque de momento parece que la guerra se centra en lograr la pantalla más larga posible, de forma que se convierta en el salpicadero, o directamente eliminarlas y proyectar las imágenes gracias al head-up display y la realidad aumentada.
Al final, cuanto más sencilla sea una interfaz de usuario y menos tiempo pasemos tocando una pantalla mientras conducimos, más seguro será el trayecto.