Para la DGT, las multas de velocidad son las más rentables: suponen más del 60% de las sanciones que pone cada año. Lo que significa que se llevan un buen montante de lo recaudado por Tráfico: 507 millones de euros en total fue su última cifra cosechada.
El organismo de Pere Navarro sigue señalando los excesos de velocidad como un problema para la seguridad vial y su medicina esencialmente es invertir en radares. En su última adquisición, 15 letales radares móviles, va a dejarse casi 1,2 millones de euros.
Así los nuevos 'súper radares' móviles de la DGT
78.650 euros. Ese es el coste total de cada uno de estos nuevos radares licitados para la DGT: así se refleja en la partida del BOE y que publica Servimedia. Multiplicado por los 15 dispositivos, hablamos de esos casi 1,2 millones de euros, incluyendo impuestos.
Según lo recogido en el pliego, Tráfico argumenta la necesidad de sustituir otros radares móviles de los que ya dispone por obsolescencia o por avería. "Se hace necesario contar con un cinemómetro de altas prestaciones, capaz de medir las velocidades en varios carriles y que pueda ser utilizado en varias modalidades de funcionamiento, en estático, sobre el vehículo o trípode, o en dinámico".
10 veces más caros que los Veloláser. Hablamos por tanto de 15 radares móviles muy avanzados según los requisitos técnicos que exige y refleja la DGT en esta partida. Deben detectar simultáneamente la velocidad de todos los vehículos que pasen por su zona, en ambos sentidos y en hasta seis carriles.
Es decir que pueden controlar al completo todos los carriles de la mayoría de puntos de las autovías españolas. Además, son aptos para instalarse en trípode o embarcados en un coche o vehículo de la Guardia Civil. Y no sólo sancionan en parado, si no que pueden hacerlo en movimiento.
Así, son más eficaces que los pequeños Velolaser, pues estos dispositivos detectan los excesos de velocidad en un máximo de dos carriles. Aunque su evidente ventaja es que son prácticamente indetectables, así que Tráfico no ha dejado de aumentar su número: hace poco más de un año adquirió 70 Veloláser. Eso sí, al ser menos avanzados costaron justo la mitad que estos nuevos 15 radares: 610.678 en total.
A la caza de infractores en autovías y carreteras convencionales. Estos nuevos 'súper radares' móviles están especialmente enfocados a controlar la velocidad en vías de alta capacidad, autovías y autopistas, ya que pueden multar simultáneamente en hasta seis carriles. E incluso ir en movimiento entre los coches, sancionando a los infractores.
Aunque la DGT también señala que se han adquirido para controlar la velocidad en carreteras convencionales, donde los fallecidos siguen engrosando las negras estadísticas de tráfico. En total en España hay más de 1.000 puntos en estas vías de ser controlados por los radares móviles de Tráfico. Hay que recordar la normativa no exige anunciar los dispositivos móviles cuando se realiza un control de velocidad.
Sea como fuere, y según datos de la DGT, este verano contaban con casi 550 radares móviles operativos: se entiende que algunos de ellos serán sustituidos por estos 15 nuevos.
Más multas con radares móviles. Lo cierto es que la mayor cantidad de multas por velocidad las firman los 780 radares fijos de la DGT, que incluyen más de 90 de tramo. En 2022 emitieron 2,58 millones de denuncias. Pero los de radares móviles las han ido aumentando: en 2021 no llegaron a las 900.000 multas y en 2022 pasaron a 1,12 millones.
Esta cantidad será aún mayor cuando estos 15 radares estén activos y vigilando nuestras carreteras: por sus características técnicas se van a hinchar a multas.
