¿Puede el Renault Talisman ser un amuleto para la renovada marca del rombo?

Con el Renault Talisman, la marca del rombo ha vuelto a la senda del diseño de coches después de años de deriva en los que no se sabe muy bien a qué se dedicaban en la casa. Se trata de un fenómeno que ya adivinamos con el nuevo Renault Espace y que ahora prosigue. Un enorme salto en calidad percibida en el interior de la berlina complementa una nueva línea exterior que, si bien no resulta todo lo revolucionaria que podría esperarse de un anhelado relevo para el maltrecho Renault Laguna, apunta maneras en una dirección: la conquista del segmento D empezando por Francia y extendiéndose por el resto de Europa.

¿Pero el segmento D no habla en alemán? Pues sí, pero según cuenta Jean-François Renaud, responsable de marketing de la marca, contra el estilo frío y rígido de las berlinas del país vecino, el Renault Talisman antepone un sentido emocional más latino que, no obstante, respeta los códigos de lenguaje del segmento D. Esas deberían ser las razones por las que elegir un Renault Talisman y no, por ejemplo, un Volkswagen Passat o un Opel Insignia, tal y como comentábamos ayer.

Mientras el runrún mata al segmento D, en Renault juran que esta es una operación a largo plazo. Hablamos de un millón de unidades, las que se venden en Europa de este segmento, y en la marca ven el Talisman como un modelo de nicho, para un cliente con unas características muy concretas, pero sin duda lo que debe de aguantar un proyecto como este, de adaptación de la plataforma CMF a las hechuras de una gran berlina, no puede ser otro que el mercado chino, donde estas grandes berlinas triunfan. Más, si hablamos de un proyecto a largo plazo, como repiten en varias ocasiones.

Por ahora, la defensa del producto frente a sus rivales más directos se basa en la calidad —;resultante en parte de haber trabajado codo con codo junto a Daimler—, que se manifiesta en varios aspectos: desde la calidad percibida, pasando por la robustez de las piezas hasta desembocar en la calidad del ensamblaje, para lo cual Renault ha invertido en su planta francesa de Douai 420 millones de euros a fin de poder garantizar, con adaptación y con formación, esa garantía de calidad que persiguen dar a su producto.

Un talismán dibujado con pasión

Y este lenguaje del segmento D no sólo se traduce en un determinado nivel de equipamiento y calidad, sino que incluye, en el exterior del vehículo, un elevado frontal caracterizado por un capó nerviado que nace de las aristas que dan lugar a un perfil muy vertical. El lateral se muestra alargado gracias a la tercera luna, que estiliza las formas hacia la parte trasera, y allí la zaga contiene el que sin duda es un signo que va a identificar a la nueva berlina francesa.

En efecto, tanto la zona delantera como la trasera se valen de las ópticas full LED en luces diurnas  sí, las luces traseras son diurnas y por tanto confieren al conjunto un aire muy singular, tanto de día como de noche  que crean una firma luminosa única, ideal para distinguir al Renault Talisman desde lejos y en cualquier momento.

¿Que cuál es la primera impresión que causa el Renault Talisman cuando irrumpe en el escenario que la marca del rombo ha preparado en el Castillo de Chantilly para darlo a conocer a los medios? Pues la verdad es que se hace difícil no tener un déjà vu de la presentación del DS 5 en los Jardines de las Tullerías, hace ahora un mes y medio. Incluso coinciden algunos de los tonos empleados para la carrocería... De todas formas, la berlina de Renault aporta más presencia y empaque, frente a la aportada por la nueva marca creada por PSA Peugeot Citroën. Se la ve más pegada a la realidad, además de más rotunda y poderosa, y sin embargo más refinada también.

No tiene ese aire de gran renovación que esperábamos, más con esa denominación tan eufónica como evocadora, pero no está nada mal. ¿Un nombre que le haga sombra? Por un oído me dicen Škoda Superb; por el otro Peugeot 508. ¿Que si es heredero del Laguna o del Latitude? No hay caso, según aclara Renaud, ya que frente a las cuatro puertas del Talisman, el Laguna era un liftback, y por su parte el Latitude todavía permanece en el mercado. Carlos Ghosn asegura que el diseño ha sido trazado partiendo de cero, y el director de Diseño Industrial de Renault, Laurens van den Acker, explica que el Talisman ha sido dibujado con pasión.

Para acabar este bloque, conviene destacar dos pequeños detalles que no acaban de cuadrar en el exterior del Renault Talisman:

Un interior de una mayor calidad que venía haciendo falta en Renault

Se abren las puertas de los coches expuestos y un zumo de periodistas procedente de concentrado se tira a la yugular de las unidades expuestas. Tiene muy buena pinta por dentro, el Talisman, o al menos eso me parece ver entre tantas cabezas; de hecho la mejora se presenta infinitamente mayor aqui dentro que en el exterior.

Esta va a ser la gran baza de esta berlina de representación cuando se ponga a la venta, entre finales de 2015 y principios de 2016, dependiendo del mercado concreto. En el caso español todo depende de cuáles sean las circunstancias más propicias para la comercialización del Talisman. Por el momento ni siquiera está calculado el precio, aunque estará dentro de los precios de mercado para el segmento D, según dejan entrever en la marca sin precisar más.

Mientras hacemos estas consideraciones hemos conseguido meter la nariz en el habitáculo del Talisman. Muy buen tacto de los materiales empleados, entre otros el cuero Nappa que viste en el acabado Initiale Paris, el elegido para la presentación a medios. En general se percibe el cuidado puesto en el diseño y la fabricación de cada uno de los elementos, para conseguir un conjunto que transmite una sensación de alta calidad y durabilidad.

También se percibe un gusto por los elementos que hacía tiempo que no conocíamos en Renault. Cuando ya hace unos años que la marca nos viene insistiendo en los efectos lúdicos de sus interiores, este Talisman recupera la idea de que una berlina no sólo tiene que ser de calidad, sino también parecerlo.

Los asientos se ven grandes y espaciosos, e incorporan dos novedades: una es la ventilación integrada, que junto a los abundantes reglajes memorizables (8 eléctricos, 4 lumbares, y aparte 2 manuales) y a la función de masaje prometen hacer de estos asientos un espacio de confort insólito en Renault; otra es la Cover Carving Technology, una carcasa flexible para los respaldos de los asientos que permite aligerar los asientos y dar más espacio para los ocupantes de las plazas posteriores.

Cosas veredes... que sin duda habrá que probar

El volante y la palanca de cambios también transmiten una impresión muy diferente a lo que era hasta ahora, desde hacía demasiado tiempo ya, el lenguaje de diseño de Renault. Calidad percibida es, una vez más, el resumen de las sensaciones que despierta. Y si nos metemos en el apartado tecnologico, de momento la gran pantalla de 8,7 pulgadas (7 y 4,2 pulgadas en los niveles inferiores) como soporte para R-Link 2 se lleva la palma de lo visual, aunque habrá que ver cómo suena ese sistema Bose Surround de trece altavoces. De momento, sobre el papel suena muy bien y al natural se ve muy integrado en el ambiente.

Motorizaciones
Energy TCe 150 EDC-7
Energy TCe 200 EDC-7
Energy dCi 110 MT6
Energy dCi 110 EDC-6
Energy dCi 130 MT6
Energy dCi 130 EDC-6
Energy dCi 160 EDC-6

Combinar el sistema 4Control, que permite unos giros más ágiles gracias a las cuatro ruedas directrices, con la amortiguación pilotada, el tacto de la dirección, la respuesta del motor y la caja automática EDC en un módulo llamado Multi-Sense que actúa como intercambiador de modos (confort, sport, eco, neutro, perso) es una de esas cuestiones que por fuerza tendremos que poner en práctica cuando sea posible mover el Renault Talisman.

También quedan anotadas las motorizaciones, con las que la marca asegura que se cubre el 85 % de la demanda de Europa. A primera vista la motorización de acceso en diésel, Energy dCi 110, tiene un difícil encaje en nuestro mercado, aun en flotas de empresa, debido a las características de la orografía española. Por el otro lado, la motorización Energy TCe 200 parece demasiado ambiciosa para un mercado como el nuestro. Es posible que el grueso de las ventas en España se componga de motorizaciones diésel medias, en el caso de flotas y renting, mientras que los gasolina que se vendan sean de 150 CV, para el canal de particulares.

Finalmente, habrá que comprobar el funcionamiento de unos sistemas de seguridad avanzada que cada vez son más un estándar de este segmento, y de otros por debajo. Cuando hablamos del asistente de luces de carretera, del avisador de ángulo muerto, del control de señales de tráfico, del control de crucero adaptativo o de la frenada autónoma de emergencia, en el fondo no hablamos de novedades sino de la incorporación al Talisman de unos equipamientos sin los cuales ya no se comprende este segmento. Ahora, lo único que cabe es evaluar su calidad de funcionamiento.

Al fin y al cabo, ese es el argumento de venta del Renault Talisman. Cuando conozcamos los precios de la berlina, podremos hacernos una idea más aproximada de cuál va a ser la estrategia de ventas. Porque, por el momento, la gente de Renault no suelta prenda. Quizá haya que esperar hasta el Salón de Frankfurt, a partir del 17 de septiembre, cuando el Talisman buscará mejorar la suerte de Renault y cosechar éxitos entre su público objetivo.

Los gastos del viaje para esta presentación han sido asumidos por la marca. Para más información consulta nuestra guía de relaciones con empresas.

En Motorpasión | Nuevo Renault Talisman, la berlina que los franceses quieren que compres en lugar del Passat y del Insignia