Probamos el Volkswagen e-up!: un coche eléctrico urbano que ofrece 260 km de autonomía desde 20.570 euros
No, el Volkswagen e-up! no es el primer coche eléctrico de Volkswagen, ni siquiera es un coche totalmente nuevo, pero sí responde a una nueva etapa en la ofensiva eléctrica del grupo alemán. Ya hemos conocido a este nuevo modelo en una primera toma de contacto por tierras valencianas, así que vamos a analizarlo.
El gran punto a favor del nuevo e-up! es su autonomía homologada de 260 km pero que pueden ser aún más dependiendo del entorno y del uso del pie derecho, y lo consigue gracias a un nuevo paquete de baterías que dobla su capacidad. Por lo demás, pocas novedades.
Volkswagen e-up!: el coche eléctrico más asequible de Volkswagen
Y es que este Volkswagen e-up! no es un coche 100% nuevo, es más, cambia bastante poco con respecto al modelo anterior. Exteriormente conserva la misma propuesta estética con una imagen sobria y muy fiel al diseño de su familia aunque al mismo tiempo es resultona. Por delante tiene unos grandes faros con luz diurna LED complementaria e integrada en las formas del paragolpes delantero y una fina parrilla en disposición horizontal.
De perfil hay poca diferencia con respecto al SEAT Mii Electric y al Škoda CITIGOe, así que hay que esperar hasta la zaga para ver más diferencias, con unos grupos ópticos que si bien son similares a los de sus primos tienen un carácter más premium y quedan mejor arropados por el portón del maletero, acabado en negro brillante.
El e-up! que apenas cambia más allá de algunos pequeños detalles y emblemas específicos. En lo referente a las cotas exteriores sigue siendo un coche del segmento A extremadamente compacto con 3,6 metros de largo por 1,64 de ancho y 1,5 de alto. Perfecto para la ciudad.
Pasando al interior también nos cuesta encontrar diferencias. El entorno es familiar, con un espacio correcto para las dos plazas delanteras y un escueto para las traseras, con el respaldo de la banqueta bastante vertical y poco espacio para los pies bajo los asientos delanteros.
En cuanto a los acabados tampoco hay muchas novedades salvo una moldura específica para el salpicadero y las tapicerías que son de buena calidad. Los mandos, botones y otros elementos utilizados para vestir el interior del e-up! nos resultan familiares de otros modelos de la casa. Se nota que es la misma plataforma que ya conocíamos en elementos como el cuadro de mandos (al que se le han cambiado las gráficas), el arranque con llave o el freno de estacionamiento manual; características un tanto vetustas.
Pequeño pero bien resuelto a nivel dinámico
Giramos la llave y emprendemos la marcha casi en el más absoluto silencio, salvo por la generación de ruido artifical. Este pequeño coche eléctrico incorpora el ruido de alerta de presencia para peatones progresivo que emite un ruido tenue de 0 a 5 km/h, creciente hasta 22 km/h y decreciente hasta alcanzar los 50 km/h.
Salimos a realizar una ruta por los alrededores de Valencia para comprobar qué tal se comporta el Volkswagen e-up! y los primeros metros pasan de forma extremadamente sencilla, sin apenas proceso de adaptación. Se trata de un coche fácil de entender y agradable desde el primer momento.
El tacto de la dirección es suave pero preciso. En su agilidad está su mayor virtud pero al mismo tiempo se siente aplomado, gracias en parte a los 1.235 kg de peso que arroja sobre la báscula. No, no es un coche ligero pero se mueve con brío y luce una calidad de rodadura confortable.
En el apartado mecánico estamos ante una mecánica relativamente nueva. El Volkswagen e-up! de 2019 utiliza la misma base motriz, con un motor eléctrico que mueve las ruedas delanteras con 83 CV (61 kW), 1 CV más que antes, y 212 Nm de par motor.
Con estos números el utilitario eléctrico se desenvuelve a la perfección entre calles, con una entrega de potencia suave y progresiva pero que si le exigimos toda la potencia disponible la desarrolla de manera decidida. Responde con contundencia si la situación lo requiere y en ningún momento sentiremos que vamos faltos de capacidad de aceleración.
Saliendo a carretera el e-up! se defiende y puede realizar desplazamientos de extrarradio sin más limitaciones que las lógicas. Dispone de tres modos de conducción (normal, ECO y ECO+). En el modo normal su desempeño es más que suficiente para hacer desplazamientos por vías rápidas. En los modos más conservadores la potencia (y otros gastos como el de la climatización) se ve limitada y en el ECO+ incluso la velocidad máxima se acota a 95 km/h.
Su configuración de coche eléctrico pequeño podría hacernos pensar en lo contrario, pero el Volkswagen e-up! nos sorprendió con una calidad de rodadura elevada después de realizar un uso mixto. Es un utilitario de cero emisiones en el que sólo echamos en falta algo menos de ruido aerodinámico. Por lo demás es cómodo, con buena pisada y agradable de conducir.
El paquete de baterías de iones de litio que utiliza ha duplicado su capacidad pasando de 18 a 36,8 kWh, con una capacidad neta de 21,3 kWh. Con ellos homologa un consumo de 14,4 kWh/100 km y una autonomía de casi 260 km (WLTP) que pueden ir mucho más lejos si sólo hacemos carretera. Después de nuestro recorrido conseguimos rebajar la media de consumo ligeramente por encima de los 12 kWh y en gran medida es gracias a su sistema de recuperación.
A través de la palanca de cambios podemos elegir entre un total de cuatro modos de freno motor. El modo más restrictivo, el B, sirve para obligar a que el motor retenga tanto cuando soltamos el acelerador que hace innecesario utilizar el pedal del freno en muchas deceleraciones y poder modular la marcha sólo con el pedal derecho.
Haciendo uso de una conducción mínimamente planificada, anticipando las deceleraciones, es más que posible acercarse a la autonomía que homologa el e-up! sin se un hypermiller. Sacar más de 200 kilómetros a las baterías del e-up! está casi garantizado, así que cumplirá de sobra los desplazamientos diarios de la gran mayoría de conductores. El handicap volverá a ser como de costumbre en los coches eléctricos el disponer de un punto de recarga doméstico o en destino.
Los tiempos de recarga para las baterías alojadas en la parte inferior de la plataforma MEB son de 16 horas para recarga completa en enchufe doméstico, 4 horas en un Wall Box de 7,2 kW o 1 hora en puntos de carga rápida de hasta 40 kW y 125 A para un 0-80%. Por cierto, la batería ha duplicado su capacidad manteniendo el mismo volumen y sólo incrementando 15 kg su peso.
En el apartado de equipamiento de serie hay que destacar que se sitúa un pequeño escalón por encima de su competencia directa, con la utilización del asistente de mantenimiento de carril y el reconocimiento de señales de tráfico. Está y puede estar más equipado que sus parientes de SEAT y Škoda.
Para equipar al Volkswagen e-up! hay que recurrir a paquetes opcionales con los que se puede dotar de una buena carga de accesorios para un coche eléctrico asequible del segmento A. Puede incorporar asistente de aparcamiento trasero con cámara de marcha atrás, control de velocidad de crucero, asientos calefactables, parabrisas térmico, retrovisores con ajuste eléctrico y térmicos, luces automáticas o sensor de lluvia.
Lo que todavía no tenemos muy claro si nos convence o no nos convence es la ausencia de un sistema de infoentretenimiento como tal y haya que recurrir a un smartphone para poder disponer por ejemplo de servicios de navegación, aunque la integración a través de la aplicación dedicada de la marca está bien conseguida. Será una cuestión subjetiva de cada usuario que sea un punto a favor o en contra.
Volkswagen e-up!: desde 20.290 euros
En definitiva el pequeño Volkswagen e-up! es un coche eléctrico de esos que empiezan a convencer. Para la mayoría de los desplazamientos diarios es un vehículo que cumple las expectativas necesarias para un usuario que utilice el coche para ir a trabajar a la ciudad, hacer algunos recados y volver a casa sin tener que estar pendiente de la autonomía.
El precio de partida es elevado si lo comparamos con su competencia directa dentro del Grupo Volkswagen, pero lo cierto es que los de Wolfsburgo han hecho un ejercicio de sinceridad con un precio de tarifa realista de 22.570 y 23.490 euros, según el acabado escogido.
El acabado Style parte de 23.490 euros y añade al acabado básico las llantas de aleación de 15", un paragolpes delantero con entradas de aire, techo en color distinto a la carrocería, iluminación ambiental, molduras con el logotipo del modelo, la moldura del salpicadero específica, una tapicería distinta y las carcasas de los retrovisores pintadas en el color de la carrocería. Todo esto se añade por un sobrecoste de 920 euros.
Estos precios no incorporan descuentos ni estrategias de posicionamiento agresivas como ha hecho SEAT con los 17.900 euros del Mii eléctrico (incluyendo descuentos). Con las dos campañas de financiación disponibles se quedan en 20.290 y 21.210 euros (sin contar el plan MOVES), por lo que la decisión de compra entre el e-up!, Mii eléctrico y CITIGOe (22.370 euros de tarifa) será más una cuestión de gusto y fidelidad a la marca que una cuestión monetaria, aunque el Volkswagen se posiciona ligeramente por encima.
