Probamos el renovado Fiat 500L: más moderno, grande y tecnológico de lo que nadie imaginó en 1957

Este año el Fiat 500 celebra su 60 aniversario desde que en 1957 se lanzó al mercado aquel pequeñajo de aspecto jovial y divertido que comenzó a popularizar la movilidad de las familias de España e Italia en coche.

Quién les iba a decir a ellos que hoy, bajo el nombre Fiat 500 se enmarca la familia de vehículos más exitosa de Fiat, formada por hasta tres carrocerías con tamaños y conceptos muy distintos. Uno de ellos se renueva, el Fiat 500L y ya lo hemos conocido. Te contamos todas las novedades.

Es normal que estéticamente no te llamen la atención los cambios realizados al Fiat 500L, son muy sutiles. El nuevo modelo sigue manteniendo ese estilo inconfundible que se ha convertido en una de las claves de su éxito, pero el 40% de los elementos del vehículo son nuevos.

La carrocería marcada por las líneas finas y redondeadas, destaca por las ópticas delanteras y el conjunto de logotipo y bigoteras a sus lados que permiten identificarlo a primera vista como un miembro de la familia 500.

Se incorporan ahora a la parte inferior del faldón delantero dos luces diurnas de LED que, al igual que en el pequeño 500, tienen forma redondeada simulando la grafía de los ‘ceros’ del 500 que le da nombre. Este es un detalle ahora común al 500 normal, al 500 X y al 500 L que permitirá ir creando imagen de familia.

Cambian ligeramente las tomas de aire del paragolpes, y los elementos cromados son tal vez el otro aspecto destacado en una carrocería que, si bien no ha sufrido una renovación demasiado drástica, sí que emana una pequeña puesta al día.

Teniendo en cuenta que la mayor parte de los clientes del 500L optan por personalizar su coche, ahora está disponible una paleta de colores más amplia que antes, con la incorporación de los Azul Bellagio, Naranja Sicilia y Bronce Donatello que se unen a los colores ya existentes hasta completar 10 opciones de tono de carrocería, los cuales se pueden combinar con colores para el techo hasta crear un total de 37 combinaciones posibles.

Un interior más moderno con la misma amplitud

En el interior sí que se perciben algo más los cambios respecto a la generación inicial del 500L, ya que todo el salpicadero ha sido rediseñado y cuenta ahora con materiales y ajustes que mejoran la percepción de los ocupantes.

Otros elementos muy cercanos, como el volante multifunción, tienen ahora una nueva disposición de los botones. También hay que resaltar el cuadro de instrumentos, que ahora está formado por dos relojes analógicos separados por una pantalla digital en color de 3,5 pulgadas.

Sentado en la posición de conducción, destacan tres cosas: la primera, la enorme superficie acristalada que incluye un área en el pilar A que permite mejorar la visibilidad lateral hacia delante, la segunda la luz que entra a través del gigantesco techo solar opcional de 1,5 metros cuadrados de superficie (fijo o practicable) y la tercera, los múltiples huecos que hay por todo el habitáculo para dejar objetos cotidianos.

Por último, el salpicadero gana muchos puntos con la incorporación del sistema de infoentretenimiento UconnectTM HD Live con pantalla táctil de 7", el cual sustituye al anterior de aspecto y manejo un tanto anticuado. Este es moderno, rápido de usar y cuenta con muchas más funciones que el anterior. Vamos, es más acorde con lo que necesitamos hoy en día.

Versión Cross y Wagon

El Fiat 500L está disponible con tres configuraciones de carrocería: normal, Cross y Wagon. La Cross convierte a este modelo en un crossover urbano de aspecto más campero, gracias a unos paragolpes reforzados de nuevo diseño que en el caso del anterior confiere un ángulo de ataque mayor, una suspensión sobre elevada 25 milímetros y detalles como el selector de modos de conducción con control de descenso de pendientes o los neumáticos M+S en llantas de 17 pulgadas, los cuales facilitan las escapadas fuera del asfalto.

Por su parte, existe un Fiat 500L Wagon en el que sí hay cambios en el largo de la carrocería, que pasa de los 4,28 metros del 500L a los 4,38 de esta disponible en versión de cinco plazas para los que necesitan mucho maletero o en versión de 7 plazas para los que tienen que llevar muchos hijos dentro.

En maletero de un Fiat 500L ya sea en acabado Urban o Cross es de 455 litros, mientras que en el Wagon es de 638 litros ó 416 en la versión de siete plazas.

Gama de motores

No hay novedades en cuanto a motorizaciones. La gama sigue siendo muy completa. En gasolina tenemos los 1.4 16V de 95 CV y 0.9 TwinAir de 105 CV. Disponible en gasolina y GLP está el 1.4 TJet de 120 CV. En gasolina y gas natural el 0.9 TwinAir de 80 CV.

Por último, aunque la tendencia está cambiando hacia los motores de gasolina frente a los diésel, en este tipo de vehículo el gasóleo todavía tiene un peso importante, de ahí que esté disponible con el 1.3 16V MultiJet de 95 CV, también con cambio Dualogic, y con el 1.6 MultiJet de 120 CV.

Dinámica de conducción

Durante la presentación que tuvo lugar en Madrid, tuvimos ocasión de conducir el Fiat 500L con la motorización más alta, la 1.6 Multijet de 120 caballos diésel combinada con la caja de cambios manual de seis velocidades.

Se trata de un motor muy agradable y capaz para un coche de este tamaño. Entrega 320 Nm de par a 1.750 RPM y eso le permite acelerar desde abajo con bastante alegría.

Declara 10,7 segundos para hacer el 0 a 100 km/h y una velocidad máxima de 189 km/h, pero a decir verdad en el tipo de uso eminentemente urbano que se le va a dar a este coche, parece más ágil de lo que indican las cifras puras.

Después de un recorrido urbano en el que el 500 L me demostró que es un coche muy agradable de usar en el tráfico de una gran ciudad gracias principalmente a esa enorme superficie acristalada de 360 grados que le caracteriza y a una posición de conducción lo suficientemente elevada para ver el tráfico con un poco de perspectiva, me fui con el fuera de la ciudad.

Encaré la autovía A1 y entonces comprobé cómo este motor de 120 CV es capaz de movernos a ritmos rápidos con bastante desahogo gracias a la caja de cambios de seis velocidades, la cual permite optimizar los consumos a ritmos de autovía ó autopista.

El sonido del motor diésel es bastante discreto en el habitáculo, donde destacan más algunos ruidos aerodinámicos que el propio sonido del motor, que está bastante bien enmascarado.

La puesta a punto de suspensiones es bastante buena para viajar en carretera, ya que absorbe los baches y ondulaciones con relativa comodidad, siempre teniendo en cuenta que hablamos de un coche de poco más de 4 metros de largo.

Subiendo uno de los primeros puertos de montaña que te encuentras a la salida de Madrid, el coche se defendió con mucha soltura sin obligarme a bajar marchas para afrontar la pendiente a un ritmo más que digno.

Lo que sí noté es que la carrocería inclina bastante en curvas en apoyo, aunque está claro que ese no es el cometido de un vehículo de este planteamiento más familiar que deportivo.

La palanca de cambios se ha rediseñado, tiene un tacto muy bueno y sobre todo está más a mano que antes ya que se ha situado en una posición elevada más cercana al volante.

Así pues, el Fiat 500L 1.6 Multijet de 120 caballos es una opción muy interesante para quien busque un compacto con aspiraciones de crossover y unas prestaciones suficientes para viajar cargado con la familia.

Además la gama de motores y carrocerías, junto con los colores y opciones de personalización, hacen del nuevo 500L un coche capaz de adaptarse a múltiples perfiles. Si a eso añadimos los precios bastante ajustados con las correspondientes promociones, entenderemos por qué la familia 500 se ha convertido en un eslabón básico para la casa italiana y por qué seguramente lo siga siendo después de esta renovación.

Precios Fiat 500L