Mercedes acaba de presentar un nuevo prototipo de todoterreno eléctrico. Se trata de del Mercedes-Benz EQC 4x4², un concept car ideado para explorar las posibilidades en todoterreno del EQC 400, el primer coche eléctrico de la marca.
El EQC 4x4² es un coche totalmente funcional, no se trata de uno de esos concept car que apenas se pueden conducir. De hecho, el coche no deja de ser una versión off-road extrema del SUV eléctrico EQC 400 4Matic. Conserva todo el sistema de propulsión eléctrica, compuesto por dos motores que dan una potencia combinada de 408 CV y 760 Nm de par motor, así como la batería de 80 kWh.
Las modificaciones aportadas al EQC fueron llevadas a cabo por un pequeño equipo de desarrolladores liderados por Jürgen Eberle. Este ingeniero desempeñó un papel clave en el anterior G500 4x4², que alcanzó una producción limitada después de su presentación en 2015, y en el Clase E All Terrain 4x4².
El EQC 4x4², destacan sus ejes multibrazo tipo pórtico y las vías ensanchadas en 200 mm, que han obligado a incorporar extensiones de pasos de ruedas. No solamente permiten así cumplir con las normas de homologación sino que además le dan un aspecto más off-road.
La antesala del Mercedes Clase G eléctrico
La altura libre al suelo ha aumentado en 153 mm con respecto al EQC de serie (el cual se conforma con 140 mm), llegando así hasta los 293 mm. Son, también, 53 mm más que en el actual Mercedes-Benz Clase G.
Los ángulos de ataque y salida han sido notablemente mejorados con 31,8º y 33º, respectivamente, cuando en el EQC de serie son de 20º. El ángulo ventral, por su parte, pasó de 11,6º a 24,2º. La profundidad de vadeo del EQC se incrementa en 15 cm para alcanzar los 40 cm. Son cifras que denotan una capacidad off-road notablemente incrementada.
La transmisión no cuenta con reductora, pero la entrega de los motores eléctricos se puede regular para que sea lo más suave posible, por lo que en principio no sería necesaria una reductora. Queda la incógnita de ver cómo en Mercedes han calibrado el ESP para que pueda actuar como los bloqueos de diferenciales de un Clase G.
Por último, el EQC 4x4² emite un “potente sonido en el interior y el exterior a través de los faros, que además de iluminar funcionan como altavoz”, aseguran en Mercedes-Benz. ¿Sonará como un Mercedes-AMG Clase G 63?
El interés de este EQC 4x4² es empezar a enseñar al público las posibles versiones que Mercedes está considerando para los próximos modelos de su submarca G recientemente anunciada, cuyo planteamiento comercial es similar a los de AMG y Maybach.
Es decir, tiene la libertad de una marca separada de Mercedes-Benz, pero mientras AMG apuesta por las prestaciones y Maybach por el lujo extremo, la submarca G estará orientada a los productos claramente off-road, aprovechando la imagen de culto del Mercedes G. De hecho, este EQC 4x4² es un adelanto del futuro Mercedes Clase G eléctrico. Porque sí, está confirmado, habrá un G eléctrico.
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