Así es como un buen anuncio ha conseguido que un Honda Accord del 96 cueste casi lo mismo que uno nuevo

Así es como un buen anuncio ha conseguido que un Honda Accord del 96 cueste casi lo mismo que uno nuevo
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Hace unos meses, el anuncio de un Suzuki Vitara de 1996 se hacía viral después de que su dueño lo convirtiera en protagonista de Jurassic Park, Mad Max y el espacio exterior. Bajo el lema "Luxury is a state of mind" (el lujo es una actitud mental), el dueño de otra reliquia se acaba de hacer famoso por el vídeo que ha hecho para vender el coche de su novia.

El coche en cuestión es un Honda Accord de 1996 con 227.070 kilómetros en su odómetro y dos accidentes que se vendía por eBay por 499 dólares. Después de que el anuncio se volviera viral, ha alcanzado la estratosférica cifra de 20.400 dólares. Todo el mundo quiere experimentar el auténtico estilo de vida californiano, gato incluido (no, la protagonista del vídeo no es la dueña del coche).

Planos aéreos, alusión a tiempos pasados... Good job

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Eres especial, haces las cosas a tu manera, es lo que te hace único. No necesitas cosas, eres feliz con lo que tienes, reza la voz en off mientras la protagonista inserta una cinta de casete para poder escuchar música de su reproductor. El caso es que, a niveles prácticos, la chica tiene todo lo que necesita: música relajante, aire acondicionado, un gato, una cafetera en el asiento del copiloto... Lo normal.

Con su pintura verde original, este Honda Accord está en bastante buen estado exterior (el interior es otro cantar). Ha cubierto la nada desdeñable distancia de 227.070 kilómetros, ha tenido dos dueños y dos accidentes (uno en 2004 y otro en 2014), y se pueden apreciar varios golpes en la chapa (se vende sin garantía, aunque la batería es nueva). Dado que el Accord 2018 tiene un precio inicial de 23.570 dólares en Estados Unidos, no sabemos qué podría impulsar a alguien a hacerse con este en concreto.

El vídeo lleva más de 400.000 reproducciones en Youtube y más de 500 comentarios en Reddit, por lo que se venda o no, el viejo cupé va a servir al productor del anuncio así como el resto del reparto a promocionarse bastante bien.

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Un buen ejercicio de marketing que apela a nuestra vena nostálgica: aquellos tiempos en los que la experiencia de conducir se anteponía a cualquier otra cosa, cintas de casete, una puesta de sol... Un estilo de vida al fin y al cabo más sosegado del que apenas quedan vestigios.

Ojo, que el anuncio ya tiene 87 pujas, y sigue subiendo. El gato no va incluido, pero los patos de goma y el convertidor para cintas de casete, sí.

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