Sebastian Vettel es uno de los pilotos llamados a protagonizar la Fórmula 1 de los próximos años, y si tiene la absolutamente necesaria suerte de estar en el coche adecuado en el momento oportuno, seguro que puede escribir páginas de oro en este deporte.
De momento, para 2009, año en el que además de dar el salto a la escudería Red Bull directamente desde la "cantera" (Toro Rosso), el joven alemán estrenará casco, el objetivo de Vettel está muy claro: "El objetivo es ganar. Obviamente, no sería correcto sentarme aquí y decir que voy a ganar el Mundial. Me gustaría, pero hay que ver qué pasa".
Para empezar, y tras el problema con la caja de cambios del día del estreno del nuevo RB5, el alemán de 21 años sorprendió ayer a los mandos del nuevo monoplaza de Red Bull, con el que consiguió marcar el mejor tiempo de todos los monoplazas de 2009 presentes en Jerez.
No obstante, el RB5 volvió a sufrir un nuevo problema mecánico con un sensor de la caja de cambios. La fiabilidad es un elemento clave para ganar campeonatos, pero para ganar carreras a veces basta con la velocidad, y parece que el RB5 la tiene. Aunque la duda es la de siempre: ¿podrá estar por encima de los Ferrari y los McLaren?