Ya oímos las quejas de Flavio Briatore acerca de la teórica superioridad de determinados motores por aprovechamiento ilegal, según el italiano, de las lagunas de la congelación del desarrollo de los propulsores. Unas semanas más tarde, la FIA confirmaba que el primer motor al que le hacía una revisión rutinaria, precisamente el del McLaren de Lewis Hamilton, estaba conforme a la normativa.
Ese anuncio puso fin a la polémica, pero según la revista Auto Motor und Sport, el resto de escuderías cree que la ventaja de potencia del motor Mercedes-Benz que empuja a los McLaren MP4-23 estaría alrededor de los 25 CV, una cifra nada despreciable considerando lo apretado del campeonato.
La principal ventaja que aporta esa potencia adicional es que permite conseguir las mismas velocidades puntas que el resto de monoplazas cargando más ala, por lo que además de ir igual de rápido en las rectas, pueden ir más rápido que todos en las curvas al disponer de más carga aerodinámica.
Willy Rampf, director técnico de BMW Sauber, asegura que "si esa cifra es cierta, una ventaja de 25 CV con la misma resistencia aerodinámica aporta un beneficio de cuatro décimas por vuelta". Casi nada. Eso sí, mientras no se demuestre lo contrario, la superioridad del motor Mercedes es el resultado de un mejor trabajo en el motor, no de las supuestas "trampas" de las que habla Briatore.
Vía | OneStopStrategy
