Si ayer era el momento de ver en directo el nuevo Porsche 919 Hybrid, hoy es el turno de verlo en movimiento por primera vez con sus colores de guerra. En palabras del nuevo piloto estrella de Porsche, Mark Webber, el 919 Hybrid es más cercano a la Fórmula 1 de lo que se esperaba y es un vehcículo divertido de pilotar.
Pero más allá de las sensaciones personales del piloto australiano, el objetivo de Porsche no puede ser otro que plantar cara a Audi. Quizás pensar en la victoria en su primera asalta tras 16 años de ausencia en la máxima categoría es algo arriesgado. Soy de los que piensan que la temporada que viene, o quizás la siguiente, Audi se marche para dejar a Porsche al frente de las hostilidades, tal y como hizo con Bentley hace una década.
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