La extraordinaria racha de Sebastian Vettel (3 carreras seguidas liderando todas y cada una de las vueltas) ha llegado en el momento clave de la temporada, cuando se está disputando el tricampeonato con un piloto tan incansable y tenaz como Fernando Alonso. Cada vez quedan menos puntos en juego, y la distancia de Vettel al frente de la tabla no hace más que ampliarse carrera tras carrera. Pero lejos de darlo por sentenciado, Alonso promete seguir luchando y no rendirse hasta el final, algo que en mi opinión le dará en algún instante de las 3 carreras que quedan una oportunidad para ser campeón, que deseo y espero que aproveche.
Para ello, Ferrari debe entrar en escena de una vez por todas en forma de desarrollo del F2012. Llevamos esperando la evolución final que deba darle a Alonso la oportunidad de presionar de cerca a Vettel desde Singapur, y ahora ya incluso aparecen informaciones que aplazan estas evoluciones para Austin. No hay tiempo. Tal y como pintan las cosas, Austin puede ser el primer match ball para Sebastian Vettel. A día de hoy, su ventaja en la tabla es de 13 puntos, pero es que contando que Alonso volviera a sudar sangre para ser segundo en Abu Dhabi por detrás de Vettel, llegaríamos a Austin con 20 puntos de diferencia. Casi una carrera de margen, faltando sólo 2. Pero esa es la realidad: si Vettel gana 2 de las 3 carreras que faltan, ya no importa ni qué haga Alonso ni que el propio Vettel abandonara en una. El título sería matemáticamente del alemán.
Sobre lo que está haciendo Fernando Alonso en estas últimas carreras, se acaban los adjetivos. Es admirable la capacidad de lucha y esfuerzo que está demostrando el piloto de Ferrari en las últimas carreras, aún siendo conocedor de su desventaja actual respecto al Red Bull de Vettel. Esos son los valores que deben ensalzarse de Alonso. Esos valores deben ser una lección ejemplar para todos nosotros. Aparquemos la magia por un momento. Alonso está siendo capaz de comprar tiempo para que Ferrari espabile con las evoluciones antes de que sea tarde. Pero lo he dicho antes: el tiempo se está acabando. Si Fernando no gana este título, nadie podrá reprocharle absolutamente nada. A Ferrari, sin embargo, sí. Alonso no está luchando contra Newey. Alonso está dejándose la vida con constantes vueltas de clasificación a lo largo de carreras enteras para luchar contra la ineficiencia de Ferrari para implementar el necesario último empujón de desarrollo del F2012.
Pero que Alonso lo esté dando todo, demostrando que está en uno de los momentos más dulces de su carrera, no implica necesariamente, como muchos parecen pensar, que Sebastian Vettel sea un piloto de segunda. No tiene nada que ver el tocino con la velocidad. Que Alonso sea muy grande, que lo es, no tiene porque conducir a la conclusión de que Vettel es pequeño. Este fin de semana parece haberse empezado a allanar el terreno mediático para la ya clásica campaña de que si alguien que no sea Alonso gana, no es que sea buen piloto, sino que hace poco menos que calentar el asiento de un monoplaza que se conduce solo. Quizás crean que de este modo están subiendo a los cielos a Alonso, pero yo creo todo lo contrario: Alonso será más grande cuanto más grandes sean los rivales a los que venza. Y Vettel tiene un cochazo, sí, pero es capaz de pilotarlo hasta unos límites que no estarían al alcance de cualquiera.
He leído este fin de semana muchas estadísticas y recriminaciones sobre si Vettel solo sabe ganar desde la pole, que no ha demostrado nada saliendo de atrás, etc. No debo ser yo quien justifique a Vettel, en especial porque soy de los que piensan que Alonso es hoy por hoy mejor piloto que el alemán, pero me duele que en este país nos carguemos a pilotos porque en un determinado momento puedan estar plantando cara a Alonso ( ¿os recuerdo cómo se rajó de Hamilton en su día y hoy hasta cae bien?). Por eso voy a intentar contestar varias acusaciones, no solo por defender a Vettel, sino porque cuando Alonso acabe ganando este título, quiero que quede claro que se lo ganó a un piloto como la copa de un pino al que le acompañó un cochazo espectacular.
Respuesta para los de “Vettel solo gana saliendo delante, y por eso no ha demostrado nada”: de las 41 victorias de Ayrton Senna, solo 7 de ellas llegaron sin salir desde la primera fila (5 saliendo 3º, una 4º y otra 5º), y 5 de estas 7 las logró en sus 2 últimas temporadas en Fórmula 1. ¿No pondremos en duda a Senna, verdad? Respuesta a los de “Vettel no ha demostrado nada saliendo detrás”: repasad por favor este inicio de temporada, en el que Red Bull no tenía claramente el mejor coche, y veréis las carreras de Vettel. O Monza el año pasado. Respuesta a los de “Vettel gana solo por el coche”: hay muchos pilotos que tienen la habilidad de rendir por encima de su monoplaza con coches justitos, y cuando llegan a un coche bueno no son capaces de exprimirlo al 100% (de los más recientes, Fisichella, por ejemplo). Llevar al límite un coche bueno no es moco de pavo. Si las 5-6 décimas que Alonso le saca a Massa son porque Alonso es mejor piloto, ¿por qué las 5 que le saca Vettel a Webber cuando quiere tienen que ser por un motivo diferente?
Me disculparéis que haya “malgastado” esta columna de análisis del Gran Premio de India en focalizarme en la lucha Alonso-Vettel, pero creo que a medida que el título está más caliente, es normal que el foco se centre en sus protagonistas. Por no dejar de comentar lo que fue la carrera en sí, haré a continuación una síntesis de lo más destacado de la misma.
De entrada, comentar que fue una preciosa carrera de Live Timming. Para mí gusto, puede que la mejor del año hasta el momento (insisto, de Live Timming). Vimos tres preciosas carreras de ritmo de Vettel, Alonso y Hamilton, los tres grandes de este campeonato, con un Webber que aunque aguantó el podium, se mostró un tanto inconsistente en determinadas fases de la carrera, e incluso dio la sensación que sucumbiría a un segundo stint de Hamilton extraordinario. También me gustó mucho, otra vez, la carrera de Nico Hulkenberg, que en mi opinión está siendo la sensación de esta segunda mitad de temporada, en especial cuando parece que Di Resta, con el otro Force India, se está diluyendo por completo. Tampoco estuvo nada mal la carrera (y el fin de semana) de Bruno Senna, aunque creo que tenían coche para hacer más. Puede que su estrategia de empezar con duros no fuera la acertada. Y para terminar, espero que el año que viene Pirelli se atreva a traer a este circuito los superblandos. Un circuito tan ancho con esas rectas puede darnos carreras muy bonitas si le añadimos el factor de las estrategias diferentes.
El próximo fin de semana veremos si Ferrari está algo más cerca de Red Bull y Alonso puede incordiar un poco más a Vettel. También os recuerdo que en mi twitter hago comentarios en directo durante toda la carrera, ya que últimamente en estas columnas el foco de atención está muy centrado en la lucha por el título y no tanto en el desarrollo de las carreras. Nos leemos por aquí después de Abu Dhabi, o durante la espera (y la carrera) en mi twitter (@smarcusf1).
