En una pequeña tienda de Tucson, Arizona, reside una compañía llamada F250R y dedicada a transformar camionetas pick-up en auténticas bestias todoterreno. Su último trabajo está basado en el brutal Ford F-150 Raptor, una de las pick-up más prestacionales del mercado, y el resultado va dirigido a aquellos clientes que quieren ir un paso más allá. ¿Qué tal SuperRaptor y MegaRaptor?
Según F250R, hay muchos usuarios que necesitan más de lo que ofrece el F-150 Raptor, aunque parezca mentira. Y no a nivel de prestaciones puras, sino más bien en cuanto a capacidad de remolque y aptitudes todoterreno se refiere. Al que quiera remolcar más de 3,6 toneladas o llevar más de 550 kilos en el cajón trasero, el Raptor no le sirve. Necesita un MegaRaptor.
La solución es el F-250 MegaRaptor (también hay SuperRaptor), que a pesar del nombre no está basado en el Raptor. Cuesta 28.000 dólares sólo la preparación (sin contar el coche base y antes de ojear la lista de opciones) y lleva entre cuatro y seis semanas de trabajo. Además, en lugar del V6 Ecoboost del Raptor esconde un motor 6.7 litros Power Stroke diésel de origen Ford. De potencia máxima no hablan, pero este bloque es capaz de desarrollar entre 300 y 450 CV, según versión.
Al enorme motor diésel hay que sumar unas llantas de calibre parecido -heredadas de un vehículo militar blindado- con gigantescos neumáticos Michelin XZL todoterreno, así como componentes de carrocería de fibra de vidrio, amortiguadores Bilstein 5100 -están disponibles también ballestas traseras- y altura incrementada en 10 centímetros.