Si te sobra el dinero y el espacio en el vano de tu coche, apunta. Ford Racing ha colocado en su catálogo de motores OEM los V8 del 2011 Ford Mustang, es decir, el 5.0 Coyote del GT y el 5.4 Supercharged del Shelby GT500. Y por módicos precios…
El Coyote (M-6007-M50), de 412 CV SAE, se entrega con la admisión entera, solo le falta el alternador y el compresor del aire acondicionado. Tiene un precio psicológico de 6.999 dólares. Es el primer 5.0 que monta el Mustang desde hace años y bastante mejor que el que reemplazó, de menos cilindrada.
Por su parte la bestia negra (M-6007-M54), de 550 CV de potencia SAE, ya sale un poquito más caro, 20.999 dólares. Principalmente se debe a su caché y a la compleja técnica de fabricación del bloque, patentada por Ford. Este se entrega sin A/C ni la servodirección. Vale el triple que el anterior.
Pero no solo habrá que fijarse en que entren en el vano, también habrá que vigilar si la campana del embrague o la caja de cambios soportan los 529 Nm del motor Coyote o los 690 Nm del 5.4 V8 Supercharged. Así es la potencia americana, llama más la atención el par que los caballos.
A modo de resumen, en la gama 2011 los Mustang gastan muy poco combustible en relación a sus músculos, debido a la inclusión de algunas mejoras para aumentar su eficiencia. Sin ir muy lejos, el motor del GT500 homologa, según normativa EPA, 10,23 l/100 km en autovía, lo cual está de muerte para 550 CV.
Aún queda mucho margen de mejora en estos motores, pues siguen sin utilizar inyección directa de gasolina, o un sistema tan sofisticado como el MultiAir, frenada regenerativa, etc. Aún así, ponen en aprietos a algunos rivales europeos y japoneses de menores cilindradas y consumos parecidos.
Vía | Autoblog
Enlace | Ford Racing
En Motorpasión | 2011 Ford Mustang GT, 2011 Shelby Mustang GT500