A finales de marzo, Ferrari desvelaba el que es hasta la fecha uno de sus modelos más exclusivos de su historia. Bautizado como Ferrari P80/C, se trata de un one-off realizado por encargo por la firma italiana para un afortunado cliente y ha sido concebido únicamente para circuito. Ahora, gracias a este vídeo, podemos disfrutar de él en movimiento.
Señalado por Ferrari como un sport prototipo moderno, el Ferrari P80/C se inspira en míticos 'cavallinos' de la casa, como el Ferrari 330 P3/P4 o el Dino 206 S de la década de los 60, por petición expresa de este cliente. Así, el objetivo del Centro de Diseño de Ferrari fue el de crear un deportivo de corte moderno, pero con guiños a estas icónicas figuras del pasado.
Nada menos que cuatro años le ha llevado a la marca de Maranello el desarrollo de este Ferrari P80/C: nunca antes Ferrari había invertido tanto tiempo en un one-off. Y siendo un modelo tan exclusivo, lo más probable era no verle jamás en acción, pero ha querido el destino que una indiscreta cámara se colase en el circuito de Monza y lo retratara mientras, valga la redundancia, se encontraba grabando una sesión en vídeo.
El cerebro de la bestia
En el vídeo publicado en Youtube por 19Bozzy92 podemos ver al Ferrari P80/C danzar sobre el trazado italiano mientras está siendo grabado desde un Porsche Macan. Y aunque en estas imágenes, por desgracia, no da rienda suelta a todo su potencial, sí que podemos escuchar rugir a su poderosa mecánica biturbo de ocho cilindros en uve "sin restricciones".
Recordemos que el P80/C está basado en el Ferrari 488 GT3, la variante de competición del 488 GTB, que se distingue por contar con una batalla cinco centímetros más corta. Su corazón es por tanto un V8 de 3.9 litros turboalimentado que supera los 700 CV de potencia a diferencia del 488 GT3 que está limitado a 550 CV.
La avanzada aerodinámica de la que hace gala, ha sido concebida para que ofrezca un rendimiento espectacular en circuito cerrado. Ésta se materializa, entre otros elementos, en un gigantesco labio frontal, un poderoso difusor de ciencia ficción en su zaga o un sobredimensionado alerón que corona a esta última. Y como demuestra este vídeo, a pesar de mostrarse bastante comedido, no decepciona. Quien pudiera ponerse a sus mandos...