Hoy no voy a dormir bien, de hecho, voy a maldecir al responsable de esta abominación, desgracia, crimen abyecto, sacrilegio… Tunear un Ferrari Testarossa puede ser o no ser un delito, dependiendo de que la cosa se haga con gusto o no. Pero destrozar un clásico como este para colocárselo a un puñetero tanque, es para miccionar y no echar gota.
Eso sí, con la tracción de tipo oruga puede moverse por cualquier tipo de terreno con las máximas garantías, ya que pocos vehículos son mejores para el todoterreno que los oruga. Por otra parte, debe ser el “Ferrari” que más combustible consuma del planeta, ya que los tanques son de todo menos austeros con el carburante. También conseguiría el record al cavallino más lento de la Historia.
Por la calidad de las fotografías no descartaría que se tratase de un fake, pero una cosa está clara, quien sea capaz de hacer algo así, merece morir en la hoguera, a bordo de un Ferrari auténtico mejor. Las llamas y el Averno son imprescindibles para purificar el buen nombre de este Testarossa. ¡Al menos que lo hubiese dejado todo del mismo color, corcho!
Diría que “gracias a” audir8, pero haré una excepción.
Vía | TuningSpain