En la mayoría de productos que compramos existen unos días para hacer devoluciones o cambios en el caso de que no se ajuste a las características de lo que esperábamos, ¿existe este derecho en el mercado de los coches de segunda mano?
En este caso, hay un contrato de por medio que han firmado ambas partes por lo que no nos encontramos en el supuesto de una compra habitual, por forma y por el coste que tiene un vehículo. Para 'devolver' un coche, primero hay que rescindir el contrato, ¿en qué supuestos se puede hacer?
Cómo se rescinde por ley un contrato de compraventa de coches
En un principio, la única manera de poder rescindir un contrato es con el acuerdo entre ambas partes. No está recogido por ley que alguien pueda devolver un coche de segunda mano que no cumple con sus expectativas.
En el caso extraño de que ambas partes quieran anular un contrato después de su venta hay que elaborar un documento de resolución que debe incluir:
- Nombre, apellidos y DNI de comprador y vendedor
- Datos del vehículo: matrícula, marca, modelo, número de bastidor y otras características particulares que pueda tener el coche.
- Cláusulas de devolución del dinero y del vehículo: cómo y de qué manera se va a hacer.
- Quién asume el coste de los gastos que se deriven de esta rescisión.
- Indicar que la propiedad del coche vuelve a recaer en el vendedor.
- Mencionar (y adjuntar) el contrato inicial de compraventa que se va a anular.
- También hay que incluir la fecha, hora y firma de ambas partes en cada página del contrato.
Con la firma de este documento, tanto comprador como vendedor, no podrán realizar acciones legales contra la otra parte con motivo del contrato que se ha anulado, aspecto que también se debería incluir en el documento de resolución.
Otros supuestos en los que puede haber rescisión de contrato
Existen otras dos posibilidades para anular un contrato en las que es probable que en última instancia haya que ir a un juzgado y que tenga que decidir el juez.
La primera posibilidad es que una de las dos partes haya sido estafada por la otra, es el caso de comprar un coche que tiene cargas económicas asociadas y que no han sido comunicadas por el vendedor ni recogidas en el contrato. En este caso, el comprador debe realizar una denuncia y puede pedir que se rescinda el contrato o que el comprador pague esas deudas que tiene pendientes.
El otro caso es que el coche tenga vicios ocultos, es decir, averías muy grandes que tenía el vehículo antes de la compra y que no han podido ser detectadas por el comprador. Existen tres soluciones en este supuesto de vicios ocultos que acabará resolviendo el juez en el caso de no llegar a un acuerdo: que el comprador se haga cargo de la reparación de estas averías, que se rebaje el precio pagado por el vehículo o las rescisión del contrato.
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