Conducir no es una tarea sencilla, requiere mucha atención y exige bastante esfuerzo, físico, pero sobre todo mental, al conductor. Podremos ir sentados en un cómodo coche, pero después de muchos kilómetros o de un largo atasco de tráfico, acabaremos cansados.
Una parte significativa de los accidentes de tráfico se deben a distracciones o comportamientos inadecuados del conductor por no encontrarse en óptimas condiciones para conducir. Así que desarrollar sistemas que puedan prever e intentar disminuir esto, pueden ayudar a reducir los accidentes de tráfico.
Ford ha desarrollado un sistema para controlar el nivel de estrés del conductor y la carga de trabajo al volante, mediante un conjunto de sensores biométricos que monitorizan al conductor, y utilizando también los sensores de los sistemas de ayuda a la conducción del coche para monitorizar el tráfico.
Primero el conductor
Ford está trabajando en un conjunto de sensores integrados en el volante. En los radios del volante un par de sensores infrarrojos registran la temperatura de la cara del conductor, mientras que un conjunto de sensores infrarrojos en el aro del volante miden los cambios de temperatura en las palmas de las manos.
Estos dos grupos de sensores térmicos se complementan con un último sensor infrarrojo debajo de la columna de dirección que mide la temperatura ambiente para compararla con la del conductor.
Además de estos se incluyen un par de sensores conductivos que monitorizan el ritmo cardíaco del conductor (son superficies de metal en el propio volante, donde se toquen con las manos). No utilizan el asiento ECG que realiza un electrocardiograma permanente al conductor.
Los sensores del volante se complementan con un último sensor piezoeléctrico en el cinturón de seguridad, embebido en la cinta, que se encarga de controlar el ritmo respiratorio.
Con todos estos sensores la unidad electrónica de proceso puede evaluar el nivel de estrés del conductor en cada momento.
Y también supervisar el tráfico
Los coches llevan cada vez más sistemas de ayuda a la conducción, y aunque todavía no sean equipamientos de serie en todos los modelos, poco a poco se irán generalizando. Estoy hablando por ejemplo de la cámara que controla las señales de tráfico y las líneas del carril, o los radares que vigilan si hay otros vehículos en las proximidades del nuestro, velan por la distancia de seguridad, etcétera.
Estos sensores se pueden aprovechar para recabar información sobre las condiciones del tráfico y de la carretera: por ejemplo saber si se está en recta o en curva, si el pavimento está mojado o seco, si hay mucho tráfico, o si hay coches detenidos más adelante.
Además se utilizan también los sensores de otros sistemas de seguridad ya obligatorios, como el ABS o el control de estabilidad, y se supervisan también la velocidad, las aceleraciones longitudinal y lateral, el ángulo de guiñada del coche, el ángulo de giro del volante, la presión sobre el acelerador y la presión sobre el freno.
Con todos estos datos y con los datos biométricos que miden el estrés del conductor, el sistema electrónico, mediante un algoritmo, estima el nivel de carga de trabajo al que está sometido el conductor y determina si está en una situación ocupada y exigente, o si está en una situación relajada y tranquila.
Y entonces actúa en consecuencia. Los vehículos también disponen cada vez más de sistemas de comunicación y multimedia integrados, que controlan por ejemplo el teléfono, los mensajes de texto o los e-mails. Pues bien este sistema puede cancelar las llamadas entrantes, o los mensajes, si el conductor se encuentra en una situación en la que no se puede distraer ni molestar.
Es decir el sistema se ocupa de ingnorar las comunicaciones entrantes para evitar que el conductor se distraiga cuando no es buen momento para ello, y para evitar que aumente su estrés al volante.
El sistema también se puede utilizar para advertir al conductor de que su nivel de estrés es contraproducente para conducir y sugerirle que se detenga unos minutos a descansar y relajarse, con un mensaje en la pantalla de información del cuadro de instrumentos.
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