Y llegó el día. Hoy se estrena a través de Amazon Prime Video la segunda temporada del show automovilístico más millonario. The Grand Tour repite por segundo año en su nueva andadura de tres temporadas firmadas inicialmente con Jeremy Clarkson, Richard Hammond y James May delante de las cámaras.
El carismático trío británico vuelve a emitir sus andanzas después de un retraso de dos meses (inicialmente el estreno estaba previsto para el mes de octubre),sin episodios del show más descargado de la historia y lo hace esforzándose por conquistar al público americano, aunque a su manera. Sí, los de la foto de portada son Clarkson y May, no clones de Donald Trump.
Coches, aventuras y mucho humor británico
El primer capítulo ya está disponible a través de la plataforma de pago de Amazon. En esta entrega podremos ver a Clakson, Hammond y May intentando determinar qué es mejor, si el pasado en forma de Lamborghini Aventador S, el presente representado por el híbrido Honda NSX o el futuro encarnado por el Rimac Concept One totalmente eléctrico.
Sí, empezamos fuerte, el Rimac fue el coche que casi le cuesta la vida a Hammond en las carreteras de Suiza al sufrir un gravísimo accidente, y aquél no fue el único accidente de Hammond durante la grabación.
Una grave pulmonía de Clarkson también condicionó los rodajes, obligando a detener el circo rodante de la tienda de campaña The Grand Tour y grabando las fases de estudio en una ubicación fija, próxima al domicilio del presentador. De ahí el vídeo anterior y un comunicado que rezaba:
"Teniendo en cuenta sus doloridas articulaciones, sus sufridores pulmones y su edad combinada de 158 años, la tienda de campaña estudio se ha instalado en una encantadora localización de Cotswolds".
Con un presupuesto estimado de 250 millones de dólares por temporada, The Grand Tour representa el mundo de las superproducciones aplicado a aficionados al motor. Una cita obligada para todo el que quiera ver coches, destrucción gratuita y, ya de paso, echarse unas risas.
