Las berlinas de representación suelen asociarse normalmente con gente trajeada y burguesa pero desde Japón han decidido que era hora de que el Lexus LS 500 F Sport entrase en escena. Con una buena dosis de picante, el aspecto del buque insignia de la división premium de Toyota mejora unos cuantos enteros, al menos en lo que a agresividad se refiere.
Sin querer hacer sombra a los coches realmente prestacionales de la casa nipona como los Lexus GS F o RC F, el LS 500 F Sport adopta algunos cambios tanto externos como internos que mejoran la percepción y las sensaciones a sus mandos.
Lexus LS 500 F Sport, berlina de altos vuelos
Por fuera es fácil diferenciarlo de la versión básica gracias a una parrilla aún más exagerada y flanqueada por tomas de aire de mayor tamaño, además de llantas de 20 pulgadas, taloneras y nueva tapa del maletero, además de un trabajo de pintura específico totalmente blanco con piezas de contraste en negro.
Pasando al interior los toques deportivos se extienden unos asientos delanteros en piel cosidos a mano, el volante forrado en el mismo material también es nuevo, así como el cuadro de mandos similar al del RC F o la pedalera de aluminio.
Asociando el acabado F Sport al LS 500 con el motor de gasolina con seis cilindros en uve de 415 caballos (no disponible para el LS 500 h F Sport híbrido) también se puede optar por el paquete F Sport Handling que consiste en una nueva dirección asistida electricamente de dureza variable, una nueva suspensión neumática más deportiva ajustable y eje trasero direccional.
Los precios aún no han sido comunicados por la marca, pero para alguien con los 121.500 euros que cuesta el modelo más no creo que suponga un problema.