La marca francesa presentará en el salón de París una visión futurista del concepto de crossover con el Renault Ondelios, un coche pensado para largos viajes por cualquier pista sin comprometer la comodidad.
Su diseño nos recuerda al Renault Mégane Coupé Concept, pero no por sus formas, sino por la apertura de sus puertas, de tipo alas de gaviota, pero con único portón a cada lado, sin distinción entre asientos delanteros o traseros.
Su particular diseño está estudiado para ofrecer la menor resistencia aerodinámica posible. Con un coeficiente aerodinámico de 0,29 Cx, sus líneas se inspiran en las utilizadas en la aviación, lo que propicia una trasera diferente a lo que estamos acostumbrados a ver.
Su estado de prototipo le permite tener en su frontal unos curiosos grupos ópticos, con grandes LED encastrados en la parrilla, formada por diferentes lamas de aluminio de formas curvas, simulando una fluidez de líneas.
En la trasera también se utiliza la tecnología LED para las luces, con forma de boomerang y que actuan como canalizadores del flujo de aire, evitando turbulencias innecesarias en la parte trasera y provocando una menor resistencia a la penetración en el aire.
Dado su carácter familiar y hecho para viajar, es lógico que cuente con tres filas de asientos, pero para maximizar el confort sólo dispone de seis plazas. Unas plazas anchas y cómodas, con asientos también extraidos de la aviación.
Su disposición garantiza un acceso sin complicaciones a cualquier plaza. Como ayuda a esto, la parte baja de las puertas se abate para formar un escalón que facilita la entrada al habitáculo. Un habitáculo cargado de tecnología.
El salpicadero cuenta con pantallas de visión trasera y displays digitales con información relevante al viaje, como velocidad o como funciona en ese momento el sistema híbrido de su motor.
Cada ocupante dispone de un dispositivo Samsung con el que se pueden ver películas, escuchar música o jugar en red a diferentes juegos. Para individualizar más el habitáculo, cada ocupante dispone de su propio sistema de climatización y de audio.
Por último, viene acompañado con un teléfono móvil, también de Samsung, que actua como llave para el conductor, abriendo el coche cuando éste se acerca a él. También permite memorizar diferentes parámetros personalizables, como la música favorita o la posición del asiento.
El motor utilizado es un versión potencia del 2.0 dCi, que llega hasta los 205 CV y los 450 Nm, que se complementa con dos motores eléctricos de 20 kW, situados en cada eje. Cada uno de estos motores eléctricos tiene una función diferenciada.
Mientras que el delantero se utiliza para ayudar al motor de combustión, al igual que el trasero, el segundo se combina con el ESP, mandando más par a la rueda que en la que se detecte alguna pérdida de tracción. Ambos se alimentan de baterías de ión-litio, recargables con la energía perdida en la frenada.
Acelera de 0 a 100 km/h en 7,8 segundos y gracias a uso de una caja de cambios de doble embrague de siete velocidades, sus consumos y emisiones se ven drásticamente reducidos, con unas cifras envidiables: 4,5 L/100 km y menos de 120 gramos de CO₂/km.
Fuente | Renault