Probablemente es uno de los expositores más sosos de todo el Salón, aunque presenten toda su gama: smart fortwo. No presentan ninguna novedad sustancial, tan sólo la pseudonovedad del mhd de 71 CV (microhíbrido, disponible desde Marzo) que no tiene ningún sistema como el del Prius o el Civic Hybrid, sino de un sistema “Stop&go” que para el motor en los semáforos y luego lo arranca para ahorrar en ciclo urbano.
Están expuestas cuatro unidades que representan a toda la gama: los acabados pure, pulse y passion; versiones coupé y cabrio y las tres motorizaciones: gasolina, diesel cdi y el mhd, que a fin de cuentas funciona con la gasolina de 95 octanos de toda la vida. El modelo más interesante es el smart BRABUS, que bajo su inocente apariencia oculta casi 100 CV de potencia, más que de sobra para callejear de forma ágil, con un consumo mixto de 5,2 l/100 Km (el único de la gama que sobrepasa los 5 litros).
Recordemos que a mediados del año pasado smart renovó su gama fortwo para adecuarse a las exigencias norteamericanas de seguridad pasiva, con lo que agrandó un poco sus reducidas dimensiones, mejoró la eficiencia de sus motores y recibió alguna que otra ventaja técnica. Tiene tres motores de gasolina de 1 litro de 61, 71, 84 CV para el smart no-BRABUS y un diesel cdi de 45 CV. Todos tienen cambio de 5 velocidades y no sobrepasan los 145 Km/h salvo el BRABUS, que pilla 155 Km/h.
El smart tiene como principal encanto que se aparca prácticamente en el mismo sitio que un coche sin carné, pero no es una simple caja de muertos al tener 4 estrellas EuroNCAP y la conocida célula de seguridad tridion. La enorme facilidad para aparcar y su bajísimo consumo de combustible, en gasolina o diesel, lo hacen ideal para los desplazamientos diarios y cortos en núcleos urbanos. Si se necesita cargar algo, tiene 220 litros de capacidad en el maletero.
