Para impulsar su ofensiva eléctrica, Volkswagen ha abierto a terceros la producción de su plataforma modular eléctrica MEB y ha contratado a los gigantes LG Chem, SKI, CATL y Samsung SDI como proveedores de celdas de batería para fabricar coches eléctricos.
Sin embargo, uno de sus proveedores podría tener problemas en cuanto al volumen de producción acordado. Según Bloomberg, Samsung ha reducido significativamente los suministros prometidos a la multinacional alemana.
Sin baterías no hay ofensiva eléctrica
Samsung inicialmente accedió a entregar baterías por un poco más de 20 gigavatios/hora (GWh), suficientes para alimentar 200.000 coches eléctricos con paquetes de 100 kilovatios hora. Sin embargo han surgido diferentes puntos de vista sobre el volumen de producción que el proveedor surcoreano puede asumir y sobre la fecha de entrega, según fuentes cercanas al asunto.
Este giro ha dejado los suministros prometidos a menos de 5 GWh; sin embargo parece que el contrato sigue adelante, pues en un comunicado Volkswagen ha asegurado que Samsung seguirá siendo su proveedor de celdas de baterías en Europa.
Lo cierto es que con la fuerte ofensiva eléctrica que está llevando a cabo el consorcio no se puede permitir el lujo de perder un contrato con un gigante de las baterías, más aún en un escenario de acceso limitado a las materias primas.
En este aspecto ha firmado recientemente un contrato con la compañía china Ganfeng Lithium, el tercer mayor productor de metales de litio del mundo. Este gigante suministrará litio al Grupo Volkswagen y a sus proveedores durante los próximos 10 años.
El consorcio también ha anunciado que invertirá 1.000 millones de euros en su primera planta de producción de celdas de batería en Europa, que estará probablemente ubicada en su sede en Salzgitter (Baja Sajonia, Alemania). La planta le permitiría disponer de una capacidad de producción propia de 10 GWh al año
De momento Volkswagen tiene un importante objetivo de producción que cumplir, pues su primer coche 100 % eléctrico, el ID.3, comenzará a producirse a finales de este año, y se necesitan muchas baterías de iones de litio para cumplir objetivos.