Definitivamente, la nueva Mitsubishi L200 ha perdido todo el encanto que tenía respecto al modelo anterior. Ha pasado de ser una pickup con una línea robusta y a la vez atractiva a ser un SUV con caja de carga aburguesado y con unas líneas demasiado suaves, aún estando basada en los Montero Evo que corren en el Dakar. Y esto es opinión mia, que ya se sabe que para gustos los colores.
Equipada con el motor 2.5 Di-D Turbointercooler de 136 CV y 314 Nm de par máximo y con dos cajas de cambio disponibles, manual de 5 velocidades y automática con convertidor de par de 4 velocidades; estará disponible en tres versiones de cabina, Single Cab (la primera en el segmento), Club Cab y Double Cab, llegando en esta última a los 5 metros de longitud total. Incorpora también sistemas de control activo de tracción y estabilidad, así como ABS de serie y el sistema de tracción a las cuatro ruedas “Super Select”, el mismo que monta el Mitsuishi Motero.
Vía | Puesta a punto