
Actualización: Según el New York Times, tras el revuelo causado por un posible conflicto de intereses, el Departamento de Estado podría haber retirado su intención de comprar vehículos eléctricos blindados. “La convocatoria está en suspenso y no hay planes para publicarla”, aseguran desde el ministerio.
Con la Tesla Cybertruck, la marca de Elon Musk se ha pegado un tiro en el pie. “Cavamos nuestra propia tumba con la Tesla Cybertruck”, decía Musk en 2023. Tras unos inicios prometedores, el interés por el coche se ha desinflado y ahora se amontonan en los campas a la espera de compradores. Y bajar su precio tampoco ayuda a vender. Por suerte para la marca, Elon Musk ha estado asesorando al presidente Trump sobre cómo recortar el gasto público. Y qué mejor manera de reducir el gasto que el Departamento de Estado compre vehículos eléctricos blindados a Tesla.
La previsión de adquisiciones del departamento para 2025, que detalla las compras que la agencia espera realizar, incluye 400 millones de dólares para vehículos Tesla blindados. El documento no especifica qué modelo de Tesla, pero todo apunta a que se trata del Cybertruck, un coche que Elon Musk siempre ha vendido como un modelo blindado.
Me sobran unas pickups blindadas
Las ventas del Cybertruck han sido modestas desde su introducción a finales de 2023. Tesla vendió unas 39.000 unidades el año pasado, lejos de las 125.000 al año que prometía la marca. Ahora que Elon Musk forma parte de facto del Gobierno de Donald Trump, Tesla ha encontrado en el Departamento de Estado, el equivalente a nuestro Ministerio del Interior, un cliente ideal para sus Cybertrucks.
Elon Musk, a base de talonario y controlar lo que se enseña y lo que no en Twitter/X se ha hecho un hueco en el Gobierno de Trump al frente de lo que ha denominado el Departamento de Eficiencia Gubernamental, DOGE por sus siglas en inglés. Y en nombre de esa eficiencia le va a vender miles de pickups eléctricas a un ministerio por valor de 400 millones de dólares. No se sabe cuántas unidades están previstas. Habida cuenta del precio tarifa del coche en EE.UU., de casi 80.000 dólares para el modelo básico, da para un mínimo de 5.000 unidades. La compra se formalizaría en el último trimestre de este año.
La compra de Cybertrucks, una elección que sería un tanto rara como vehículo táctico o de transporte, por no mencionar su desastrosa fiabilidad (hasta siete llamadas a revisión en un año), podría plantear un conflicto de intereses. O no.
Musk no para de pregonar sus propios esfuerzos para erradicar lo que considera un gasto innecesario en la administración federal. Pero eso no es un problema si las agencias federales se gastan el dinero en sus empresas.
De hecho, Elon Musk ya es un importante contratista del Gobierno. Las empresas que posee o controla han conseguido 13.000 millones de dólares en casi 100 contratos diferentes con 17 agencias federales en los últimos cinco años. SpaceX, la empresa espacial, recauda la mayor parte de ese dinero y es uno de los mayores contratistas del Gobierno. Hasta ahora no ha sido un problema y la compra venta de los Cybertrucks no debería ser un problema tampoco.
Aun así, debido al potencial conflicto de intereses dado el destacado papel del CEO de Tesla, Elon Musk, en la Administración Trump, el documento de previsión de adquisiciones para 2025 fue actualizado, eliminando la mención a Tesla y cambiando la partida a “Vehículos eléctricos blindados” en su lugar.
No deja de ser un eufemismo para hablar de los Tesla Cybertruck. Blindar una serie de Chevrolet Equinox EV fabricados en México o una de serie de GMC Hummer no parece la opción más eficiente a nivel económico ni acorde con las ideas de Trump.
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Fotos | Tesla