En un momento en el que el mundo del automóvil se centra en reducir consumos, minimizar las emisiones contaminantes, fabricar neumáticos de baja resistencia a la rodadura, regenerar energía en las frenadas y utilizar técnicas de fabricación que reducen las fricciones de las partes móviles de los motores, llega el ahorro en agua del limpiaparabrisas.
Bosch ha desarrollado un brazo limpiaparabrisas con boquillas de pulverización integradas y control inteligente que no sólo ahorra hasta un 50% de agua, sino que la visión del conductor no se ve alterada por el agua pulverizada. Además puede incluir un sistema para calentar el agua y mejorar el poder de limpieza. En este vídeo puedes ver una explicación gráfica del funcionamiento del Bosch Jet Wiper y una comparativa con un sistema convencional:
Gracias a la electrónica integrada se controla en todo momento la posición de las escobillas, así sólo se inyecta agua cuando éstas se mueven en sentido ascendente, de forma que se recoge y distribuye inmediatamente por el parabrisas sin reducir la visibilidad. Además limpia de forma eficaz sin importar la velocidad a la que se circule.
Este sistema proporciona una limpieza óptima a lo largo de toda la escobilla, incluida la porción de parabrisas que necesita la cámara de visión que utilizan algunos sistemas de asistencia a la conducción. El nuevo Volvo XC90 equipará estos brazos de limpiaparabrisas de serie.