Para los que disfrutamos con la conducción deportiva el circuito de Nürburgring es un icono, un lugar al que debemos ir al menos una vez en la vida y, a poder ser, a los mandos de un coche rápido. Los afortunados que viven cerca tienen el mejor parque de atracciones que podamos soñar, yo si fuese mi caso estaría abonado.
Pero no deja de tener sus riesgos y no debemos olvidar que allí el que rompe paga. Además no estás solo, suele haber bastante tráfico y lo normal es que sean vehículos muy diferentes cada uno rodando al límite. En este vídeo tenemos un interesante susto de un conductor a los mandos de un Renault Mégane RS por culpa de un accidente y también por un pequeño despiste.
Tres parejas de coches más el que lleva instaladas las cámaras se lo van pasando en grande rodando deprisa. Pero al llegar a una rápida de derechas con un pequeño cambio de rasante se encuentran un buen pastel, varios coches han sufrido un accidente y, aunque apenas invaden la pista, se ha creado montonera y toca frenar.
Unos y otros van frenando con mayor o menor margen, pero el amigo del Mégane RS amarillo se despista un pelo y de repente se encuentra haciendo slalom entre los coches casi parados y los que han sufrido el accidente. Un buen susto que su compañero con el Mégane blanco no parece apreciar, porque se escapa por la hierba acelerando a saco para volver a la acción.
