Luca De Meo, CEO del Grupo Renault, afronta el gran reto de revertir la compleja situación económica que atraviesas el fabricante galo. Un objetivo para el que el directivo no cuenta con la aportación del Dacia Spring, el inminente nuevo SUV eléctrico de la filial rumana del conglomerado.
"No estamos aquí para perder dinero, pero está claro que no ganaremos mucho con el Spring", ha afirmado abiertamente De Meo. Sin embargo, la razón de ser de este todocamino, que llegará al mercado en septiembre para convertirse en el coche eléctrico más barato del mercado, será el de reducir la media de emisiones de coches vendidos por Renault.
Es decir, la firma del rombo prevé que lanzando un modelo eléctrico a precio de derribo y que por tanto se venda masivamente, logrará atenuar su media de emisiones y evitar así las multas millonarias como a la que se enfrenta Volkswagen.
"Al calcular la ecuación económica de un coche como el Spring, también hay que tener en cuenta las multas que se pueden evitar con grandes volúmenes de energía eléctrica. Al tiempo, podemos ofrecer a las personas que no tienen mucho dinero la posibilidad de conducir un eléctrico", ha justificado De Meo.
Recordemos que la media de emisiones de los coches vendidos por cada fabricante no podrá ser superior a 95 g/km de CO₂, y serán muchas las marcas que no lleguen. En cambio, otras, aseguran estar a salvo.
El Renault 5, un sustituto del ZOE, pero más barato
Respecto al precio de los coches, el mandamás de Renault asegura que "cada vez serán más caros. Para 2025, si quieres hacer un 25-30 % híbrido y otro tanto eléctrico, los precios subirán. Por eso también en el plan no apostamos a la explosión de volúmenes. No creemos que el mercado europeo vuelva a nivelarse antes de 4-5 años", ha aseverado tajante De Meo.
No obstante, tiene claro que el camino hacia la movilidad libre de emisiones es el único viable para la industria: "Puedo asegurar que el motor de combustión convencional está muerto sin electrificación. Incluso los híbridos van a tener problemas en algunos segmentos", vaticina el ejecutivo.
En este sentido, el futuro Renault 5 eléctrico, al cual le bastaron tan solo unos días para disparar el hype, será el sucesor del superventas cero emisiones Renault ZOE a partir de 2023.
"El ZOE durará otros 3-4 años. El Renault 5 tendrá como objetivo desempeñar su papel", ha ratificado De Meo, quien además confirmó que tendrá un precio inferior a su predecesor gracias a la "reducción de los costes de batería y la aparición de nuevas tecnologías que harán más accesible la electricidad".
Paralelamente, la electrificación se apoderará también incluso de una revolucionada Alpine y hasta de 100.000 coches usados que Renault transformará cada año en coches eléctricos.
Ahora tan solo queda ver si el plan estratégico "Renaulution" de De Meo fructifica, al tiempo que avanza en su meta de transformar Renault en empresa tecnológica que además fabrique coches.
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