Probamos el nuevo Skoda Karoq: un SUV compacto que sigue destacando por espacio y calidad

Siguiendo la tendencia general de todas las marcas, los SUV se han convertido en los superventas de Škoda. La marca de la República Checa tiene en los Kamiq y Karoq sus modelos más vendidos, y ahora ha renovado este último para mantenerlo al día en cuanto a diseño y tecnología. Lo hemos probado y te contamos primeras impresiones con el nuevo Škoda Karoq.

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Škoda es una de las marcas que más está sufriendo la crisis global de microchips que tanto afecta a la industria del automóvil y a otras. Sus ventas en 2021 crecieron, pero en los tres primeros meses de 2022 se han reducido un 25,4% quedándose en 186.200 unidades. Pesa a ello, sigue siendo la marca de volumen más rentable del Grupo Volkswagen y están mejorando su facturación.

En España la evolución de Škoda ha sido muy positiva en los últimos años, ya que ha conseguido colarse en el Top 10 del mercado, con una cuota que ronda el 4% y la previsión es asentar esos niveles en cuanto se supere la crisis de los microchips.

El Karoq, un producto clave para Škoda

Desde su lanzamiento al mercado en el año 2017, el Karoq ha sido un absoluto éxito de ventas internacional como demuestran las más de 364.650 unidades comercializadas hasta la fecha, de las cuales 20.240 se han quedado en España.

Estamos por tanto hablando del modelo que hoy en día representa el 20% de las ventas totales de Škoda, el tercero más vendido en Europa y el segundo en España en 2021, y por tanto un elemento clave en el buen hacer comercial de la marca.

Otro buen dato que acompaña a Karoq es el hecho de que el 60% de sus ventas van dirigidas a particulares, quedando solo un 20% a empresas y un 10% a alquiladoras.

Ahora este SUV de 4,39 metros de largo se renueva, y exteriormente lo hace con un objetivo claro: mejorar su eficiencia aerodinámica en un 10% para ayudar así a reducir consumos y emisiones de CO2.

Para ello cuenta con una parrilla delantera de nuevo diseño, un paragolpes de nueva factura que mejora el Cd-0.005, una parte inferior del parachoques con un Cd-0.010 y unas llantas mas aerodinámicas que reducen el Cd-0.006 y están disponibles con diferentes diseños hasta las 19 pulgadas.

A todo eso unimos la llegada de ópticas delanteras de nuevo diseño con opción Matrix LED y tendremos ante nosotros un ligero lavado de cara que aunque no es el más evidente de todos, si que le permite mantenerse fresco y renovado.

El trabajo aerodinámico lógicamente no termina en la parte delantera, ya que también hay cambios que no se ven a simple vista en los bajos del coche, que ahora permiten reducir las emisiones de CO2 -0.6g/km o detalles como el alerón que culmina el techo, con dos nuevas y discretas aletas, que reduce por su parte -1.1g/km.

En ese portón posterior, encontramos también unas ópticas de nuevo y estilizado diseño. Más minimalistas, permiten que la palabra Škoda que preside el centro del portón posterior gane presencia y le da robustez.

Llamativo es el diseño del difusor trasero situado en los bajos del vehículo, con forma cóncava.

Interior

Si en el exterior los cambios son mínimos, en el interior ocurre más de lo mismo. De hecho, a simple vista es complicado identificar lo que cambia respecto al Karoq que se vendía hasta ahora.

El SUV estrena tapicerías con nuevos materiales. Acompañan a esos tejidos los nuevos materiales aplicados a las molduras de las puertas que son de mayor calidad tanto a la vista como al tacto.

El Ambient Lighting, que son las luces LED que hasta ahora recorrían los perfiles de las puertas delanteras y salpicadero dándole ambiente con diferentes tonos de luz seleccionables, se amplía hacia las puertas posteriores que ahora también cuentan con esta tecnología.

El maletero sigue siendo uno de sus puntos fuertes, ya que cuenta con capacidad digna de coches unos centímetros más grandes. En condiciones normales tiene 521 litros, con el sistema VarioFlex amplía hasta 588 litros. Si bajamos los asientos posteriores con el VarioFlex, podemos llegar a tener 1.630 litros de capadidad.

Impresiones de conducción

Škoda presentó la renovación de la gama Karoq en España esta semana, ya que los coches ya están disponibles para pedidos en los concesionarios. Preguntados sobre los plazos de entrega que tienen estos modelos, nos hablaron de entre cinco y seis meses.

Para la toma de contacto elegimos la versión con el motor 2.0 TDI de 150 CV con tracción 4x4 y cambio DSG, aunque sorprendentemente en este modelo el 60% de las ventas las copan las versiones de gasolina, tanto 1.0 TSI de 110 CV como los 1.5 TSI de 150 CV y el 2.0 TSI de 190 CV.

Tanto los motores de gasolina como los diésel que se aplican a este modelo, han recibido una actualización llamada EVO para hacerlos más eficientes. Hay que tener en cuenta que esta plataforma no permite micro hibridación ni hibridación total, por lo que cualquier mejora es importante para reducir emisiones de CO2.

Estas mejoras en los motores permiten reducir hasta en 8g/km las emisiones de CO2, aunque si sumamos optimizaciones que se han hecho en caja de cambios (-1,6g/km), la transmisión al eje trasero en los 4x4 (-1,1g/km) o los frenos (-0,4g/km), las reducciones en emisiones pueden llegar hasta los 10g/km.

Al volante, sinceramente, las variaciones apenas se aprecian. El 2.0 TDI de 150 CV sigue siendo ese SUV cómodo y con buenas prestaciones que conocíamos hasta ahora. Sus 360 Nm de par ayudan a ganar velocidad con fuerza y se nota muy vivo.

Durante la ruta, pudimos subir hasta el puerto de Navacerrada y circular por las carreteras de los alrededores.

Gama Škoda Karoq y precios en España

La gama Škoda Karoq ya está disponible en los concesionarios españoles de la marca, y cuenta con cuatro niveles de acabados distintos: Active, Ambition, Style y Sportline. Los precios con campañas y financiación quedan como se muestra en la tabla de arriba.