Probamos la Mercedes-Benz Citan: una furgoneta que se siente más coche que nunca y quiere rivalizar con la Volkswagen Caddy
La nueva Mercedes-Benz Citan acaba de estrenar nueva generación, y ya hemos podido tener una primera toma de contacto con la furgoneta más pequeña de la firma alemana.
La hermana menor de las furgonetas de la estrella llega con una propuesta renovada, comportamiento muy parecido al de un turismo y un equipamiento de serie (y opcional) que son de los mejores de su categoría, además de contar con una capacidad de carga más ambiciosa que nunca.
Mercedes-Benz Citan: algo más que una Renault Kangoo
La nueva Mercedes-Benz Citan puede que te recuerde a otra furgoneta del segmento. Sobre todo sabiendo que el modelo anterior era una adaptación de otro modelo célebre en el mercado.
En esta nueva generación la Citan vuelve a ser un desarrollo conjunto realizado con Renault y se fabrica en la planta de Maubeuge de la marca francesa con una propuesta que viene de la mano con la nueva Renault Kangoo que se estrenó el año pasado y que ha supuesto a su vez un gran salto adelante en el modelo francés.
Mercedes-Benz nos ha asegurado que para esta generación se han involucrado de manera mucho más activa en la fase embrionaria del modelo, y así poder crear una furgoneta mucho más próxima a los estándares que se esperan en un modelo de la firma alemana.
Pero, ¿por qué Mercedes-Benz sigue apostando por el segmento de las furgonetas compactas? La respuesta no es una única razón, sino que es múltiple pero sencilla al mismo tiempo.
La larga tradición de Mercedes-Benz con los vehículos comerciales con las Vito y Sprinter necesita una furgoneta de tamaño más contenido para completar su gama. Sobre todo teniendo en cuenta que un 60% de las furgonetas vendidas son small vans, Mercedes-Benz necesita seguir teniendo un escalón de acceso.
Además el mundo del e-commerce, los vehículos dimensionados a repartos más pequeños, los nuevos retos de movilidad y el reparto de último kilómetro son una bolsa de clientes donde la firma alemana necesita echar sus redes, además de contener las emisiones de CO₂ de la gama.
Por último, un último factor cada vez está más presente en las marcas y lo hemos escuchado repetidas veces en otros lanzamientos recientes: el uso dual de pequeños autónomos que buscan un solo vehículo para usar en el trabajo y con la familia o para escapadas de fin de semana ha impulsado al mercado a que un 70% de las ventas sean vehículos mixtos y un 30% con configuración de furgón cerrado.
Con todo esto la Mercedes-Benz Citan ha conseguido vender 20.000 unidades en el periodo 2012-2021. Así que no les quedaba más remedio a los de Stuttgart que seguir confiando en el modelo, y ahí que se han metido de lleno.
La nueva Citan se ve mucho más moderna por fuera. Lo primero que destaca es su frontal que ya no parece tanto una adaptación de la Kangoo como en la generación anterior para asemejarse más a un Clase A con su gran estrella enmarcada en una parrilla amplia y escoltada por faros con tecnología LED.
Las cotas de partida de la Citan arrancan en 4.498 mm de longitud y 1.860 mm de ancho (sin contar los espejos), con 1.830 mm y 1.800 mm de altura para las variantes furgón y combi respectivamente. En 2022 se podrá encargar con batalla ampliada y una longitud total de 4.922 mm, que en el caso de la Tourer se puede equipar con hasta siete plazas.
Pero donde está realmente el peso en la diferenciación de este modelo con respecto a la Kangoo y a cualquier otro modelo de la categoría es en el interior.
Nada más sentarnos tras su volante nos damos cuenta de que estamos ante un modelo de Mercedes-Benz. Lo primero es el volante con mandos multifunción muy similar en disposición (no tanto en materiales) a los que se utiliza en los turismos de la marca, incluyendo los controles hápticos para la gestión del cuadro de mandos y el sistema de infoentretenimiento.
Por delante del volante se coloca una instrumentación con doble esfera analógica y una generosa pantalla digital a color entre medias donde podremos navegar por los menús típicos de Mercedes-Benz para tener la información del viaje, las indicaciones de la navegación o cualquier información sobre el vehículo.
El salpicadero está protagonizado por unos aireadores en forma de turbina típicos de muchos modelos de la casa, y que a su vez escoltan a una pantalla táctil colocada sobre el salpicadero en una disposición bastante acertada que no nos hará apartar la vista demasiado de la carretera.
Los mandos de la climatización son físicos, como debe ser, y no son iguales. Son más sencillos en la versión furgón y con pantallas monocromáticas en la Tourer. Quedan mejor, pero su funcionamiento es más confuso por ejemplo cambiando el flujo de aire. No sabemos qué posición corresponde a qué selección hasta que no aparece en la pequeña pantalla.
Incluye de serie plataforma de carga inalámbrica en algunos acabados y conectividad con Android Auto y Apple CarPlay a través de USB, pero sobre todo se integra el Mercedes-Benz User Experience en el sistema operativo para controlar por voz algunas de las funciones.
Dinámica de turismo, pero no de Mercedes-Benz
Saliendo a rodar con la nueva Mercedes-Benz Citan, primero probamos la variante cerrada de furgón cerrado y motorización diésel de 116 CV. En esta primera toma de contacto realizamos una pequeña ruta por los alrededores de la zona norte de Madrid y con visita a algunos polígonos, coto de caza de la Citan.
Allí descubrimos que la menor de las furgonetas de Mercedes-Benz se mueve como pez en el agua, con un comportamiento ágil y sencillo, quizá incluso demasiado, aunque eso se merece una explicación con detenimiento.
A juzgar por el tacto de los mandos y el comportamiento de la Citan, parece que Mercedes-Benz ha querido dotar a la furgoneta compacta de una facilidad de uso extrema. Así, en entornos urbanos, bacheados y realizando maniobras constantes se agradece tener una suspensión blanda (más en el tren delantero que en el trasero), una dirección muy ligera y un embrague extremadamente suave.
Como suele ocurrir, cada vehículo necesita de un cierto periodo de adaptación, pero por ejemplo el comportamiento esponjoso del tacto del pedal de embrague nos impedía dosificar bien en reducciones al llegar a una rotonda o que el tacto de la dirección en carreteras de curvas resulta poco intuitivo.
Todo tiene sus pros y sus contras y aunque posiblemente a medida que se hagan más kilómetros a sus mandos estos peros iniciales se vayan diluyendo, a bote pronto nos ha parecido que la Volkswagen Caddy tiene un comportamiento más satisfactorio.
Esta mecánica 112 CDI está basada en el ya conocido bloque 1.5 turbodiésel que ofrece 116 CV y 270 Nm de par motor. Una configuración que de serie monta transmisión manual de seis relaciones y que como en el resto de mecánicas podrá equipar un DSG de siete relaciones a partir de 2022.
Nos ha gustado que pese a ser una furgoneta se comporta como un coche compacto. Dejado al margen la reactividad del tren trasero (reforzado de serie) tiene la agilidad y la viveza de un coche utilitario, así que es algo que agradecerán quienes pasen muchas horas a su volante repartiendo paquetes o haciendo cualquier otro tipo de actividad profesional.
Sí es cierto que nos ha parecido una furgoneta poco insonorizada, colándose mucho ruido de rodadura y aerodinámico. A 2.500 rpm también se percibe mucho sonido proveniente del motor. A 2.000 rpm en cambio resulta muy silencioso, coincidiendo con los 100 km/h en sexta velocidad.
Una vez en destino nos pusimos a trastear un poco con la zona de carga, y Mercedes-Benz ha hecho un buen trabajo en este aspecto. Ahora la Citan puede acoger dos europalets gracias a haber estrechado los pasos de rueda, incorpora panelado interior y unas puertas traseras con apertura 60/40 y hojas abatibles hasta 180º.
La capacidad de carga para la Mercedes-Benz Citan tal y como sale de fábrica es de 700 kg de carga útil y hasta 935 kg con el eje trasero reforzado opcional. En cuanto a volumen son 2,5 m³ para la versión de batalla corta y 3,7 m³ para la de batalla larga.
La puerta corrediza es cómoda, pero la carrocería básica sólo cuenta con una en el lateral derecho. Según las versiones se puede equipar otra en el lado izquierdo.
Mercedes-Benz Citan Tourer: a caballo entre el monovolumen y el trabajo
Después de dejar a la versión furgón nos subimos a la Mercedes-Benz Citan Tourer. El habitáculo es casi idéntico, pero la sensación es mucho más espaciosa al no tener el mamparo tras los asientos delanteros y contar con superficies acristaladas. En su caso sí hay doble puerta corredera, pero además hay opción de elegir entre puertas traseras de doble hoja o de portón.
La segunda fila de asientos es espaciosa y puede sustituir a los monovolúmenes para aquellas familias con niños que buscan un coche con espacio, pero además la practicidad viene de la mano de unos asientos traseros abatibles que quedan enrasados con el plano de carga.
La capacidad de carga sigue siendo importante también en las versiones de pasajeros, y la Citan Tourer ofrece 775 litros para la configuración de batalla corta que se pueden ampliar hasta 2.400 litros abatiendo los asientos.
A la hora de conducir, no hay grandes diferencias con la versión furgón más allá de lo más obvio. El tacto es el mismo, pero se percibe algo menos ruidosa. No podemos asegurar que esté mejor aislada, pero quizá el ruido queda más acolchado por los elementos del habitáculo.
Metiéndose un poco en el jardín de los turismos, Mercedes-Benz ha querido dotar a la Citan de un equipamiento de seguridad y tecnológico por encima de la media.
Así la furgoneta alemana nos ofrece cinco estrellas Euro NCAP, seis airbags para la versión furgón y siete para la Tourer (incluyendo el airbag central), Attention Assist, asistente de ángulo muerto, detección de cambio de carril o Active Brake Assist de serie. Opcionalmente también puede equipar Distronic, asistente de aparcamiento o cámara de marcha atrás.
Donde sí hay diferencias lógicas es en el motor, porque probamos la variante de gasolina con el motor 110. Esta mecánica utiliza el bloque 1.3 litros turbo con una potencia de 131 CV que es la más potente de la gama.
Es cierto que superado el momento de ausencia de par a bajas revoluciones, el bloque estira más, es más suave y se comporta con una mayor alegría. Quizá nos obliga a jugar algo más con el cambio pero a cambio se siente más refinado y menos rumoroso que la mecánica diésel.
Eso sí, tal y como nos aseguraron desde la propia marca las mecánicas de gasolina recibirán unas ventas meramente testimoniales. La preferencia suele ser por los motores diésel, y en este segmento ni siquiera el 112 CDI de 116 CV que hemos probado será el más vendido pese a que es el que mejor comportamiento ofrece.
La Citan ya está disponible en los concesionarios y la gama completa de motores incluye tres diésel entre 75 y 116 CV y dos gasolina de 102 o 131 CV para la versión furgón, mientras que para la Tourer las mecánicas se limitan a tres: se pierden los diésel más y menos potentes. Los precios (PVP) arrancan en 22.520 euros y alcanzan los 27.438 euros. A continuación dejamos el listado completo:
Mercedes-benz citan |
motor |
potencia |
precio (PFF) |
precios (PVP) |
---|---|---|---|---|
furgón |
108 CDI |
75 CV |
18.286 euros |
22.520 euros |
|
110 CDI |
95 CV |
19.086 euros |
23.488 euros |
|
112 CDI |
116 CV |
19.886 euros |
24.456 euros |
|
110 |
102 CV |
18.193 euros |
22.407 euros |
|
113 |
131 CV |
19.129 euros |
23.540 euros |
TOURER |
110 CDI |
95 CV |
21.694 euros |
26.643 euros |
|
110 |
102 CV |
20.559 euros |
26.262 euros |
|
113 |
131 CV |
21.494 euros |
27.438 euros |
Por precio, la nueva Citan se sitúa ligeramente por debajo de la Volkswagen Caddy, pero considerablemente por encima de la Renault Kangoo. El modelo francés parte de los 15.340 euros (sin impuestos), unos 3.000 euros menos que la versión equivalente de la Citan.
En primavera de 2022 llegará una variante 100% eléctrica con una potencia de 75 kW (pico de 90 kW) y 245 Nm, con una automonía en torno a los 285 km, pero aún no han revelado más detalles. Sí sabemos en cambio que no habrá ninguna opción ni mild hybrid, ni híbrida ni híbrida enchufable.
También habrá que esperar hasta 2022 para acceder a equipamiento interesante como el freno de estacionamiento eléctrico, el sistema de acceso y arranque sin llave Keyless Go o la propia transmisión automática y las configuraciones de batalla larga.
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