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Valentino Rossi parece no tener fondo. Desde que le dio por las cuatro ruedas no hace más que intentar coger un volante en cuanto tiene la más mínima oportunidad. Este fin de semana pasado lo ha hecho en el Findomestic Memorial Bettega que se celebró en el Bologna Motorshow, en Italia. Ante 50000 espectadores, seguramente algunos atraidos por el fenómeno publicitario de tener a Rossi entre los participantes, consiguió terminar la carrera en tercer lugar por detrás de Gigi Galli (oficial de Mitsubishi Ralliart) y del inglés Mark Higgins. Esto lo hizo a los mandos de un Subaru Impreza WRC, coche que ya conoce de otros affairs con el mundo de los rallies del campeonísimo italiano.
Vía | motogp