Tenemos nueva llamada masiva de revisión de Daimler, aunque en esta ocasión no tiene nada que ver con las emisiones de sus motores diésel como ocurría este verano, sino por un defecto de fábrica en el airbag de acompañante así como en el sistema de detección de los cinturones de seguridad. Más de 110.000 unidades Mercedes-Benz deberán pasar por el taller, afectando, por el momento, únicamente a modelos comercializados en Estados Unidos.
Así lo ha informado Daimler mediante un comunicado a la Agencia Nacional para la Seguridad del Tráfico de Estados Unidos (NHTSA): un total de 110.096 coches de la marca de la estrella deberán ser revisados tras ser detectado un fallo de funcionamiento en el airbag del copiloto, al que se suma la deficiente operatividad del sistema que detecta si los cinturones están abrochados.
Es la segunda revisión masiva en lo que va del año en Norteamérica: el Mercedes-AMG G 65 ya tuvo que pasar por el taller porque la NHTSA consideraba que daba marcha atrás demasiado rápido.
El defecto encontrado en el airbag comprende a casi la totalidad de vehículos afectados, 104.633 unidades, mientras que el fallo en los cinturones de seguridad se saldará con 5.433 modelos de la estrella pasando por el taller.
El nuevo Clase C y el GLC, los más afectados
Según informa Mercedes-Benz, los modelos perjudicados muestran de forma incorrecta que el airbag está activado, por lo que se puede dar el caso de que no esté en funcionamiento y no se despliegue en caso de accidente.
Los modelos en los que se ha localizado este defecto son un buen grueso de la nueva Clase C de Mercedes-Benz, incluyendo algunas de sus versiones deportivas, así como el Mercedes-Benz GLC. En concreto, deberán acudir a la revisión los C 300, C 300 4Matic, C 350E, C 43 AMG, C 63 AMG, y C 63S AMG producidos a partir de 2018. A estos se suman el Mercedes-Benz GLC 300, el GLC 350E, el GLC 43 AMG, el GLC 63 AMG y el GLC 63S AMG, producidos tanto este 2018 como el próximo año 2019.
Por su parte, la compañía también ha descubierto un fallo en el sistema que detecta si los cinturones están abrochados correctamente, ya que no alerta siempre al conductor cuando no hacen uso de él los ocupantes.
Más de 5.400 coches deberán ser revisados siendo los modelos siguientes los que muestran este defecto (todos también producidos este 2018): el C 300 4Matic Cabriolet, el C 43 AMG Cabriolet, el C 300 Cabriolet, el C 300 Coupe, el C 300 4Matic Coupé, el C 43 AMG Coupé, el E 450 Coupé, el E 53 AMG Cabriolet, el S 450, el S 560, el E 450 Cabriolet, el 4Matic Cabriolet, el E 450 4Matic Coupé, el E 53 AMG Coupé, el S 450 4Matic, el S 560 4Matic, el S 63 AMG y el S 65 AMG. Asimismo, dos Mercedes-Mayback también deberán pasar por el taller: el S 650 y S 560 4 Matic.
Por el momento, Mercedes-Benz ha limitado la llamada a revisión a modelos comercializados en EE.UU, no obstante, como ha ocurrido en otras ocasiones, también podría extenderse a coches comercializados en otros mercados. Estaremos atentos a posibles comunicaciones por parte de Daimler.
