Según ha informado la agencia de noticias AP, los negociadores de General Motors y el sindicato United Auto Workers (UAW), han alcanzado un acuerdo provisional que podría poner fin, no de forma inmediata, a una huelga masiva que hoy cumple un mes.
De acuerdo a las últimas noticias publicadas por la UAW, que representa a 48.000 trabajadores, el principio de acuerdo será muy beneficioso para la fuerza laboral, aunque no se han desvelado detalles.
¿Más cerca del final?
El principio de acuerdo se ha logrado tras meses de negociaciones, pero no pondrá fin de inmediato a la huelga, según las informaciones más recientes publicadas por el sindicato.
De hecho, es probable que los trabajadores permanezcan en las líneas de piquete durante al menos dos días más mientras los dos comités sindicales votan sobre el acuerdo, después de lo cual los miembros deberán aprobarlo.
Aunque no se han revelado detalles de este posible contrato, que tendrá cuatro años de duración, es probable que cubra varias de las reclamaciones más importantes de los trabajadores: aumentos salariales, más estabilidad y la fabricación de nuevos vehículos en algunas de las fábricas que General Motors quiere cerrar.
"La prioridad número uno del equipo de negociación nacional ha sido asegurar un contrato sólido y justo que nuestros miembros se merezcan", ha dicho el vicepresidente de la UAW, Terry Dittes.
Por su parte, el fabricante capitaneado por Mary Barra ha prometido "más de 7.000 millones de dólares en inversiones en Estados Unidos, más de 5.400 empleos, salarios más altos y más beneficios".
Contando con los trabajadores que se han suspendido de empleo en Canadá, México y Ohio, General Motors ya ha despedido casi a 10.000 asalariados.
Mientras tanto, los analistas calculan que este parón masivo ya le cuesta al gigante de Detroit 90 millones de dólares al día, y desde que empezó estiman que General Motors ha perdido 660 millones de dólares.
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