El nuevo Bugatti Chiron no corre tanto como el hiperdeportivo que conocemos. De hecho, para que todo fuera bien debería rebelarse contra el propósito que dio luz verde al Chiron, que no fue otro que ser más rápido que el Bugatti Veyron, y no debería correr nada de nada. El nuevo Bugatti Chiron se ha presentado en la Feria del Mueble de Milán... y es un sofá. Este sofá.
El sofá Chiron de Buggati...
A ver... que no es coña, que va en serio. Aunque parezca un sofá del Ikea al que alguien le ha dejado encima unos cojines con el logo de Bugatti, en realidad estamos ante lo último de la marca de automóviles francesa de gran lujo y competición fundada por Ettore Bugatti en 1909.
Decíamos que el sofá Chiron de Buggati se enmarca en la colección de mobiliario Bugatti, que se compone de elementos tan singulares —y, previsiblemente, tan singularmente caros— como la cama Chiron (sí, también) que vemos sobre estas líneas, las butacas, la chaise longue y la mesa de centro diseñadas por Bugatti.
Tradición familiar Bugatti
Antes de que te lleves las manos a la cabeza, cabe recordar que el padre de Ettore Bugatti, Carlo Bugatti, era un apasionado del diseño de interiores en general, y de los muebles, de las joyas y de las cerámicas en particular, que tuvo por hijos a dos diseñadores de coches, Ettore y Jean, y a un escultor llamado Rembrandt.
Y al padre de semejante saga, a Carlo Bugatti, pertenece el diseño llamado Cobra, en el que se inspiran las sillas que vemos aquí.
Este diseño tan innovador data de 1902, y ha sido reinterpretado ahora utilizando fibra de carbono en la fabricación de estas piezas de mobiliario. De estas sillas Cobra sólo se van a fabricar 110 unidades, a juego con los 110 años de Bugatti, y si sus formas sinuosas nos remiten al Bugatti Chiron, en sus acabados podemos apreciar el emblema de la casa y la bandera tricolor francesa.