Michael Schumacher lo ha comentado, Malasia va a ser una lotería. Y en Red Bull creen firmemente en ello, y si no que se lo digan a Christian Horner, que dice que los neumáticos van a ser la clave. Nada nuevo porque son una incógnita en mojado, salvo por los test de Abu Dhabi en los que Pedro de la Rosa probara las Pirelli en condiciones de falso mojado. Nada que ver, en absoluto, con la tromba que nos podemos esperar que caiga en Sepang este domingo.
Todos contamos con que llueva a mares, pero ¿qué pasa si no sucede esto? Puede que por un casual (raro) la carrera sea en seco. Entonces tendríamos los problemas de abrasión que ya hemos comentado en el análisis del circuito. Pero también puede darse una condición de lluvia intermitente. Esto, para Horner, sería en pocas palabras un apocalipsis.
La clave va a estar en montar los neumáticos adecuados en el momento justo. No importa que condiciones haya. Por suerte nosotros clasificamos bien, y eso lo podemos traducir en puntos
Exceso de confianza o realismo, lo cierto es que si Red Bull califica como en Australia tiene asegurado que puede encabezar una prueba que se complicará casi 100% seguro. Una vez arranquen los primeros libres se verá cómo las condiciones climatológicas afectan a la temperatura de las ruedas, sobre todo "en las curvas rápidas" admite Horner. Y es que un punto fuerte de Red Bull son las combinadas de alta velocidad. Si los neumáticos no funcionan óptimo ahí, las cosas se comprimirían.
Y a eso le sumamos que pueda haber sorpresas en la calificación del sábado (el año pasado fue un fiasco con Ferrari por ejemplo), o bien que haya una carrera de locos, como últimamente en Sepang, o sin irnos más lejos, en Corea.
Vía | Motorsport-total
