Allá por el Gran Premio de Brasil de 1995, McLaren y Mercedes-Benz comenzaron su relación en la Fórmula 1. La escudería británica acababa de terminar una infructuosa relación con Peugeot. Por su parte, el fabricante alemán llevaba tan sólo dos años en la Fórmula 1 (en 1993 junto a Sauber). De la mano de Ilmor, la marca de Stuttgart regresó a la máxima categoría como motorizador, tras muchos años de ausencia.
Durante el Gran Premio de Canadá, McLaren y Mercedes-Benz cumplirán 300 grandes premios juntos. Desde que comenzó la relación hace casi dos décadas, los éxitos han sido importantes: tres títulos de pilotos (Mika Hakkinen en 1998 y 1999 y Lewis Hamilton 2008) y un título de constructores (1998). Cuatro títulos que, no nos engañemos, tanto para McLaren como para Mercedes-Benz, referentes cada uno en su campo, se antojan como pocos.
Desde 2010 la relación entre McLaren y Mercedes-Benz ha cambiado. Los alemanes decidieron poner toda la carne en el asador y tener su propia escudería. McLaren pasaba de ser la niña de sus ojos a ser un cliente más. Pero a pesar de todos los rumores, la escudería de Woking se muestra orgullosa de todo lo que ha vivido junto a sus socios de Mercedes-Benz.
Juntos forman una de las relaciones más largas en la Fórmula 1 pero ya se sabe que en la máxima categoría hasta las mejores parejas acaban pasando por el mal trago del divorcio. De momento están juntos y de esa forma celebrarán sus 300 grandes premios juntos. Quizás el futuro les depare caminos diferentes, de momento, el objetivo sigue siendo común.
