Lo mejor:
Cinco de cinco para el señor Loeb que ya tiene más claro eso de ganar todas la pruebas del campeonato y por ahora no tiene quien le tosa.
Dani Sordo aguantó la dureza de los tramos argentinos y finalizó en una gran segunda posición. Lastima que no aguantará el ritmo durante la segunda etapa, ya que el viernes estuvo marcando tiempos de cabeza.
El segundo de Ford, Jari-Matti Latvala contuvo sus instintos e intento terminar en la posición más alta posible. Los problemas mecánicos lo mandaron finalmente hasta la sexta posición.
Los pilotos de Stobart volvieron ha zara su regularidad y se llevaron una cuarta y una quinta plaza que le permiten acercarse al equipo BP Ford Abu Dhabi en la clasificación de marcas.
Lo peor:
Por segundo año consecutivo a Mikko Hirvonen se le ha vuelto a atragantar el rally sudamericano. El año pasado fue un toque contra una piedra y esta vez le tocó un problema de sobrecalentamiento del motor, el primero en mucho tiempo.
A Petter Solberg también le acosaron los problemas. Tras retirarse el domingo por un fallo en el sistema de alimentación del combustible, le robaban el maletín en el que tenían guardado el pasaporte, información privada sobre el equipo y algo de dinero.
Poca participación por parte de los hombres importantes del campeonato. Cuanto más lejos mayor es el gasto y por lo tanto menor es la participación.
La propia imbatibilidad de Loeb se esta volviendo en contra del campeonato. El interés por los aficionados que esperan emoción es menor e incluso el de los nuevos participantes ya que tienen menos posibilidades de destacar.
