Llevamos ya una tercera parte del Mundial de Rallyes y parece que la lucha por el título de pilotos puede acabar antes de los que lo hizo la campaña pasada. Sébastien Ogier consiguió su cuarta victoria en Portugal y su liderato sigue ampliándose después de que sus principales rivales fueron cayendo uno a uno. Una prueba en la que destacaron los numerosos accidentes que se produjeron y la contundencia de los mismos, impidiendo en varias ocasiones que los pilotos pudieran reengancharse al día siguiente.
Sin duda, el de Ott Tänak en el mismo punto que Jari-Matti Latvala tuvo aquel grave accidente en el que bajó la colina dando vueltas de campana, fue el más espectacular (afortunadamente no hubo consecuencias que lamentar) y dejó al estonio fuera de la que a la postre será su última prueba con un WRC este año. La lluvia y los aficionados hicieron una vez más del Rally de Portugal una prueba muy especial. ¿Será la última vez que lo veamos en el sur?